Herrera destaca el crecimiento económico y la mejora “exponencial” de los servicios públicos durante los 35 años de Autonomía
El presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera, defiende en un “reflexión” que hoy publica El Norte de Castilla, que el Estatuto de Autonomía de la Comunidad, que cumple 35 años, ha propiciado “un importante desarrollo económico” y desde su aprobación, en 1983, “se ha conseguido también una mejora exponencial de los servicios públicos, entonces absolutamente incipientes”. “creo que hay razones suficientes para valorar de forma positiva este tiempo de autonomía que juntos hemos vivido”, afirma.
Juan Vicente Herrera asegura que todo lo que hasta ahora ha invertido y aprendido la Comunidad en materia de servicios sociales es “un capital para estos próximos 35 años” y exige un modelo de financiación que aporte “recursos suficientes” para atender esas prestaciones y “valore debidamente su coste real y los factores que influyen en él”.
El jefe del Ejecutivo regional defiende que en el futuro, la Sanidad, la Educación y los Servicios Sociales “serán mucho más avanzados” y existirá también un sistema de conciliación de la vida familiar y laboral “infinitamente más vigoroso del que ahora disponemos”. Herrera destaca que ese sistema de conciliación será “imprescindible” junto a “subirse al tren” de la economía 4.0 para afrontar los “graves desafíos demográficos”. Asimismo, agrega que ese reto requiere de que el Gobierno y la UE, “definitivamente se doten de herramientas potentes” en esta materia.
Juan Vicente Herrera también destaca la apuesta de la Comunidad, por su patrimonio natural y cultural y asegura que en los próximos 35 años “seguramente encontraremos nuevas formas de proteger y preservar ambos patrimonios para que sigan siendo imagen de la excelencia y aval de atractivo para Castilla y León”.
El presidente analiza asimismo la realidad de la Comunidad desde el punto de vista institucional y recalca en su opinión la “estabilidad” de una tierra “serena y reflexiva”. Además, ensalza el proceso de Diálogo Social y se pregunta quién podía anticipar en 1983 que Castilla y León iba a ser “ejemplo para España y el mundo” y alcanzar un centenar de acuerdos de concertación.
El máximo responsable del Gobierno regional insiste en que el diálogo político y el social junto al civil cuya regulación están impulsando, “seguro van a continuar como firme seña de identidad de Castilla y León dentro de 35 años”.
Un diálogo, recalca, que debe servir a la Comunidad “para culminar sin nuevas demoras un proceso que es imprescindible para articular institucionalmente nuestro amplísimo mundo rural”, en relación a una “moderna ordenación del mismo, con la que garantizar la supervivencia y capacidad de hacer de sus ayuntamientos”.