Libertad con cargos para la agente de policía local que entregó el arma homicida
Tras la sorprendente revelación de que hay otra tercera persona implicada de algún modo en el asesinato de Isabel Carrasco, y que además es una mujer agente de la Policía Local del Ayuntamiento de León, comienzan a trascender importantes detalles sobre su versión de los hechos y sobre el arma presuntamente utilizada para la ejecución de la presidenta del PP y la Diputación.
El Ayuntamiento de León ha confirmado, después de muchas horas, que la agente entregó en la noche de ayer martes un bolso que contenía el arma con la que supuestamente se habrían hecho los disparos. Pero se acogen al secreto se sumario de la investigación policial y judicial para no dar más detalles. Ya se sabe que tras declarar la jueza del caso ha decretado su libertad pero con cargos, ya que se le imputa un presunto delito de encubrimiento.
Esta agente de policía es R.G.R., de 41 años. Tras su inmediata detención nada más comparecer voluntariamente en Comisaría a última hora de la tarde de ayer fue sometida a un primer interrogatorio. Según ha corroborado iLeon.com de fuentes fidelignas, esta policía defiende que no se dio cuenta de que tenía en su poder el arma presuntamente homicida hasta no haber pasado alrededor de 30 horas después del asesinato.
¿Cómo pudo ser así? Porque Triana Martínez, la hija de la presunta autora material, a la que conoce por amistad, se encontró con ella en la huida del lugar de los hechos en el paseo de la Condesa mientras ella estaba haciendo la compra, presumiblemente con el maletero abierto, y Triana depositó en una bolsa el arma sin que se diera cuenta. Esa es su versión, que la Policía Nacional trata de contrastar.
El propio director general de la Policía Nacional, Ignacio Cosidó, ha afirmado hace unos minutos en rueda de prensa que R.G.R. ha sido puesta en libertad con cargos, e implicada por lo tanto en el suceso, de modo que ha abandonado hace horas la Comisaría leonesa.
Sin número de serie: imposible de rastrear
De lo que ya no hay duda es de que la investigación de la Policía Judicial se ha cerrado prácticamente una vez aparecida el arma con la que se disparó contra la presidenta a bocajarro. Se trata de una pistola marca Taurus y, como es muy habitual en casos similares, tiene el número de serie borrador para impedir seguir su rastro y procedencia.
De los seis proyectiles que tiene de carga, la pistola homocida sólo tiene la mitad, de manera que se confirma lo publicado por iLeon.com: que son tres las balas que fueron disparadas. Al menos con esa arma. Las que impactaron dos en la espalda y otra en la nuca de la víctima.