Los encerrados siguen sin contacto con el exterior

El diputado socialista Joaquín Llamas se quedó fuera.

Milena Pasetti

Los cinco trabajadores encerrados en la Diputación provincial continúan sin contacto con el exterior y con las puertas de la zona donde realizan la protesta cerradas con llave. Esta mañana ha intentado mantener una reunión con ellos el diputado socialista Joaquín Llamas, pero se ha quedado sin posibilidad de entrar.

Casi simultáneamente, y por primera vez desde que comenzó el encierro de los trabajadores el pasado lunes, la presidenta Isabel Carrasco ha accedido a hacer declaraciones públicas sobre el tema.“La Diputación está actuando completamente dentro de la legalidad en este asunto. Es una decisión tomada por un equipo de gobierno y por el pleno de una institución provincial.Quiero dejar algo muy claro, esto no es algo contra mí”, indicó.

“Lo que estamos haciendo es preservar el normal funcionamiento de la Diputación. Esto es algo que no ha ocurrido nunca en la historia reciente de este edificio”, remarcó al tiempo que repetía que todas las actuaciones, desde el punto de la administración de personal, se enmarcan dentro de la legalidad vigente.

“Esto jamás se ha visto”

Por su parte, el diputado socialista Joaquín Llamas lamentó lo que está sucediendo con los trabajadores. “Hace más de treinta años que trabajo en esta casa y nunca se ha visto algo como lo que sucede ahora, la presión a la que se somete a los trabajadores. Nunca se ha visto un ambiene laboral más enrarecido”, señaló.

También aclaró que el Grupo Socialista “nunca votó ni votará a favor de ningún despido en esta casa” y que concurrirá cada día a intentar hablar con los empleados despedidos, a quienes calificó como “compañeros”.

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