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La Diócesis de León organiza un acto público para presentar la 'encíclica verde' del papa Francisco
La Diócesis de León ha organizado para mañana viernes a partir de las 20 horas en el Salón de Actos del Seminario Mayor de San Froilán (Plaza de Regla, 8, frente a la Catedral) un acto público con estrada libre hasta completar el aforo en el que se presentará la Carta-Encíclica 'Laudato si, sobre el cuidado del la casa común', que acaba de publicar el papa Francisco y que esta mañana se ha dado a conocer en Roma, en el Aula Nueva del Sínodo del Vaticano.
El acto organizado por la Diócesis pretende abordar las grandes líneas maestras de este documento para invitar a la reflexión a los diocesanos y a toda la sociedad leonesa sobre cuestiones centrales que el papa Francisco plantea en esta Encíclica y que pivotan sobre el interrogante “¿Qué tipo de mundo queremos dejar a quienes nos sucedan, a los niños que están creciendo?”, una pregunta que para el pontífice “no afecta sólo al medioambiente de manera aislada, porque no se puede plantear la cuestión de modo fragmentario y esto nos ha de conducir a interrogarnos sobre el sentido de la existencia y el valor de la vida social”.
El vicario episcopal de Relaciones Públicas, Antonio Trobajo, y el profesor de Teología Moral del Centro Superior de Estudios Teológicos San Froilán, Toribio Cuesta, serán los encargados de conducir este acto público de presentación de la encíclica 'Laudato si', que toma este título de la invocación de San Francisco 'Laudato si, mi Signore' con la que el santo de Asís inicia el 'Cántico de las Criaturas', para recordar que la Rierra, “nuestra casa común, es también como una hermana con la que compartimos la existencia, y como una madre bella que nos acoge entre sus brazos”.
A partir de esta inspiración inicial, a lo largo de seis capítulos, el papa Francisco remarca que “ahora esta tierra maltratada y saqueada clama y sus gemidos se unen a los de todos los abandonados del mundo” y pide afrontar una auténtica “conversión ecológica”, según expresión de San Juan Pablo II, para “cambiar de ruta asumiendo la urgencia y la hermosura del desafío que se nos presenta ante el cuidado de la casa común”.
El papa Francisco se dirige de manera singular a los fieles cristianos y, retomando palabras de San Juan Pablo II, precisa que éstos “en particular, descubren que su cometido dentro de la creación, así como sus deberes con la naturaleza y el Creador, forman parte de su fe”, pero desea “entrar en diálogo con todos sobre nuestra casa común”, con una propuesta que apunta hacia una “ecología integral, que incorpore claramente las dimensiones humanas y sociales, inseparablemente vinculadas con la situación ambiental”.
La encíclica es un texto amplio que concluye con un mensaje claro y esperanzado ya que el papa Francisco muestra su convicción en que “la Humanidad tiene aún capacidad de colaborar para construir nuestra casa común”, en que “el ser humano es todavía capaz de intervenir positivamente” y en que “no todo está perdido, porque los seres humanos, capaces de degradarse hasta el extremo, pueden también superarse, volver a elegir el bien y regenerarse”.