El 28% de los autónomos de la comunidad tiene un nivel de cualificación alto, frente al 32,9% de la media nacional
Un estudio de Asempleo expone que, de acuerdo con los datos del INE, en la comunidad había en el segundo trimestre de 2013 un total de 204.932 autónomos, de los que un 58,8 por ciento tenía un nivel de cualificación medio, un 28 por ciento, alto, y un 13,2 por ciento, bajo. En este sentido, el peso de los autónomos de Castilla y León con alta formación sobre el total de trabajadores por cuenta propia (28 por ciento) es “considerablemente” inferior a la media del conjunto de las autonomías (32,9 por ciento).
El informe explica que la tasa de actividad emprendedora (porcentaje de autónomos sobre el total de la población en edad de trabajar) se situó en 2012 en Castilla y León en el 5,59 por ciento, ligeramente por debajo de la media nacional (5,7 por ciento).
Los datos difundidos este jueves señalan que el 26,8 por ciento de las personas que emprendieron un negocio durante 2012, lo hizo “por necesidad”, porcentaje superior superior a la media de España, que se situó en el 25,6 por ciento.
En el análisis por autonomías y respecto a la tasa de actividad emprendedora, por encima de la media de España se encontraban en 2012 regiones como Cataluña (7,48 por ciento), Andalucía (6,1 por ciento) y C. Valenciana (5,83 por ciento). En el lado opuesto, Asturias (2,17 por ciento), Murcia (3,86 por ciento) y País Vasco (4,36 por ciento) fueron las que presentaron menores tasas de actividad económica.
El documento constata “cierta relación” entre la tasa emprendedora por necesidad y la tasa de paro. Así, regiones como Castilla-La Mancha, Extremadura o Murcia, con tasas de paro muy superiores a la media, presentan mayores porcentajes de emprendedores por necesidad. En el lado opuesto, comunidades como Madrid o País Vasco, con tasas de paro muy inferiores a la media, presentan los menores porcentajes de emprendimiento por necesidad.
En concreto, las regiones donde más se emprende como alternativa al desempleo son: La Rioja (38,9 por ciento), Castilla-La Mancha (37,4 por ciento), Galicia (31,2 por ciento), Murcia (31,1 por ciento) y Extremadura (28,7 por ciento). En el lado opuesto: Madrid (18 por ciento), Asturias (18,4 por ciento), País Vasco (20,6 por ciento) y Baleares (20,7 por ciento), son las que presentan un menor índice de emprendimiento por necesidad.
Solo uno de cada tres autónomos (32,9 por ciento) tiene un nivel de cualificación alto. En general, el nivel formativo que posee la inmensa mayoría de los trabajadores por cuenta propia es medio (54 por ciento de los autónomos). Destacan el caso de las regiones de Madrid y País Vasco (ambas con un 46,1 por ciento) y Cataluña (34 por ciento), por contar con un porcentaje de autónomos con alta formación superior a la media nacional. En el caso opuesto, se sitúan Castilla La Mancha (19,9 por ciento), Extremadura (21,3 por ciento) o Galicia (25,6 por ciento).