Villaquilambre reparte alimentos a 180 vecinos
Los concejales Juan Carlos Cortina, Manuel Rodríguez Almuzara y Manuel Mitadiel, participaron, junto con los voluntarios del municipio, en el reparto de 2.280 kilos de alimentos básicos, organizados en lotes, para 180 vecinos del municipio, miembros de 57 familias, “en buena parte familias que han empezado a tener serios problemas económicos a raíz de la crisis, tras perder sus empleos y agotar sus prestaciones”, según señala el concejal de Bienestar Social, Juan Carlos Cortina.
Los alimentos consisten, fundamentalmente, en leche, galletas, pasta, legumbres, conservas, aceite, alimentos infantiles, etcétera. Proceden de los excedentes de la Comunidad Europea, que gestionan el Fondo Español de Garantía Agraria –organismo autónomo del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación- y Cruz Roja, a través del programa Alimentos que, en Villaquilambre, ha tenido tres fases durante el pasado año, siendo éste el tercer reparto. Para acogerse a este programa, los interesados tienen que solicitarlo en las oficinas municipales y aportar documentación sobre su identidad y situación económica, que se especifica en la propia solicitud. El plazo terminó el 18 de febrero.
El año pasado se acogieron a este programa 63 familias, siendo un total de 165 personas los beneficiarios. “Este año hay nuevas familias en el programa que no han solicitado servicios sociales anteriormente, sobre todo parejas jóvenes”, explica el concejal de Servicios Sociales, quien una vez más destaca y agradece la importantísima labor del grupo de voluntarios del municiipo.
De hecho, la existencia de más y nuevas personas en situación precaria ha provocado que el gobierno popular y cívico de Villaquilambre haya puesto en marcha más y nuevas formas de ayuda; concretamente, el año pasado creó las ayudas extraordinarias para facilitar la compra de alimentos en los supermercados del municipio, concretamente en el que se unió al programa: el supermercado Más y Más de Villaobispo. Este programa, netamente municipal, ha tenido ya dos ediciones y tendrá continuidad este año. Una característica singular del mismo es que vincula la precariedad económica con la falta de empleo y, por ello, junto con los vales para la compra de alimentos se incluyen talleres para orientar la búsqueda de empleo. El nuevo programa ha tenido como beneficiarias a 46 personas que, además de los vales, recibieron un curso sobre habilidades en la búsqueda de empleo y una charla informativa sobre las prestaciones de desempleo.
Con ello, explica el concejal, “queremos ofrecer una ayuda lo más integral posible a las personas que, estando en situación de desempleo, han llegado a una situación límite, y echarles una mano, no sólo en sus necesidades básicas de alimentación, sino también a remontar su situación”. El gasto total del programa ha sido de 5.000 euros.
