El nuevo Conservatorio para León se salta otro curso por el retraso de las obras, bloqueadas por la Junta
La primera vez que la Junta de Castilla y León prometió la construcción de un edificio nuevo y propio para albergar el Conservatorio de Música de León capital corría el año 2009. Se renovaron aquellos compromisos en 2016 y 2018, personalmente por el entonces presidente del Gobierno autonómico, Juan Vicente Herrera. Después se diseño incluso llevar la enseñanza musical oficial a la 'barriga' del estadio de fútbol de la ciudad, algo que sólo impidió una intensa protesta social. Y la última promesa oficial del nuevo presidente, Alfonso Fernández Mañueco, situaba en 2023 el primer curso en que sería una realidad la nueva sede, ya ubicada definitivamente en el barrio de La Palomera.
A estas alturas ya se sabe que el nuevo Conservatorio tampoco podrá abrir para el próximo curso 2025/2026. No dará tiempo. Porque desde hace año y medio ya, no hay solución al abandono de las incipientes obras del edificio por parte de la empresa CHR Europa Gestión y Construcción que había resultado contratada y comenzado a trabajar en mayo de 2021. con un presupuesto de 7,8 millones de euros.
En ese año y medio, desde el parón en la primavera de 2023, la Consejería de Educación ha sido todavía incapaz de readjudicar los trabajos de una estructura que se encuentra parada con un esqueleto aproximadamente al 50% de su construcción total, según constaba en los informes oficiales de la Junta. Una institución que hace cuatro meses justificaba la falta de actuaciones con una supuesta “complejidad” para retomar el contrato hacia una nueva empresa que remate el inmueble.
Mientras, la Consejería de Educación de la Junta continuará como hasta ahora, y desde que asumió la competencia de esta educación musical, utilizando el edificio de la céntrica avenida de Santa Nonia que es propiedad de la Diputación de León. De este modo, con todo el panorama de retraso tras retraso, la institución provincial comprueba cómo no termina de llegar la esperada recuperación del inmueble, en el que la Junta ha llegado incluso estar como 'okupa', al negarse a pagar una compensación, por la cesión del edificio.
