Los veterinarios piden a la Junta un plan contra la enfermedad hemorrágica que ha ocasionado 133 casos en León este año
El Sindicato de Veterinarios de León (SIVELE-USCAL) ha instado a la Junta de Castilla y León a establecer un plan biosanitario que permita la inmunización de toda la cabaña ganadera en la última reunión de su Junta Directiva, ante la actual situación de la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE).
Según los últimos datos publicados por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, basados en las últimas notificaciones registradas de enfermedades de los animales de declaración obligatoria en España, León, con 133 casos de EHE, es la provincia de Castilla y León con más bovinos afectados en 2024. Doce municipios cuentan con declaración de la enfermedad, con 1.825 animales sensibles a la misma, y mantienen en vilo a los ganaderos de la tercera (Salamanca y Ávila, primera y segunda) provincia con más censo de vacuno de toda Castilla y León.
Los veterinarios recuerdan que Castilla y León es la segunda CCAA de nuestro país en producción de carne y leche de vacuno, lo que supone que esta actividad ganadera es un sector estratégico, y de gran riqueza, desde todos los puntos de vista, ya sea un enfoque económico, social o medioambiental.
La enfermedad hemorrágica epizoótica (EHE) nunca había sido detectada en España, ni en la UE, hasta el pasado 10 de noviembre de 2022, cuando las autoridades italianas comunicaron la detección del virus en explotaciones de ganado bovino en la isla de Cerdeña y unos días más tarde en Sicilia. El 18 de noviembre de 2022 se detectaron los primeros casos por el serotipo 8 en el sur de España. Hasta ese momento se tenía constancia de su existencia y circulación en América del Norte, Australia, Asia y África. Actualmente la enfermedad se extiende por la España peninsular, Portugal, Sudeste de Francia, Cerdeña y Sicilia. La transmisión a través de mosquitos y la ausencia de vacuna hasta hace muy poco tiempo ha hecho que la diseminación en nuestro país haya sido muy rápida. Hasta el momento las islas Canarias y Baleares se consideran libres.
Se trata de una enfermedad vírica infecciosa no contagiosa que se transmite por mosquitos del género Culicoides y afecta a rumiantes domésticos y salvajes. En el ganado vacuno, aunque suele cursar con una clínica moderada y autolimitante, en algunos casos puede originar cuadros más graves, con fiebre, lesiones de la mucosa bucal, cojeras, inflamación del rodete coronario, inflamación de la lengua, diarrea hemorrágica, abortos, etc., pudiendo llegar a provocar secuelas y, en menor medida, la muerte de los animales. El ganado ovino es susceptible a la infección, pero poco a la enfermedad clínica, y el caprino es muy poco susceptible a la infección. También puede afectar a animales silvestres como los ciervos, gamos y corzos.
La EHE es una enfermedad de declaración obligatoria de acuerdo, por tanto, es obligatorio comunicar inmediatamente a los Servicios Veterinarios Oficiales cualquier sospecha, recomendándose adoptar medidas de desinsectación en animales e instalaciones como sistema de prevención. La enfermedad hemorrágica es una traba comercial para los movimientos intracomunitarios de las especies sensibles a la enfermedad.
Los ganaderos, señala el sindicato veterinario, pueden adoptar algunas prácticas de manejo para minimizar los riesgos de la enfermedad en el ganado vacuno:
- Supervisión diaria de los animales, especialmente en los sistemas de producción extensivos.
- Atención temprana de los animales afectados, asegurando su estancia en lugar sombreado y confortable, disponibilidad diaria de agua y alimentación para evitar que pierdan su condición corporal.
- Tratamiento veterinario lo antes posible desde el inicio de los síntomas, siguiendo las indicaciones y prescripciones individualizadas realizadas por el veterinario clínico para cada ejemplar.
- Mantener al rebaño en buen estado sanitario general.
- Realizar actuaciones de lucha vectorial que podrá incluir desde la protección de los animales frente a los vectores, desinsectación de instalaciones y medios de transporte hasta el control de las zonas de cría de los vectores.
Vacunación
Sivele-Uscal recuerda que desde primeros de julio se dispone de la primera vacuna autorizada temporalmente por el procedimiento de emergencia frente al serotipo 8 del virus, que es el que está afectando en España. Se trata de una vacuna inactivada, que cumple con las condiciones de seguridad y eficacia exigidas. Con una primera fase de producción de dos millones de dosis, es de aplicación voluntaria por el ganadero, aunque siempre tiene que estar prescrita previamente por el veterinario de la explotación. El sindicato veterinario cree que “esta vacuna puede suponer una herramienta para evitar las pérdidas directas y facilitará el movimiento de animales susceptibles, ya que se espera que en el último trimestre de este año se modifique la legislación facilitando el movimiento de los animales que hayan sido vacunados”.
Actualmente el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación está tramitando un real decreto para la concesión de ayudas directas destinadas a compensar los perjuicios económicos producidos en las explotaciones ganaderas de bovino afectadas por la enfermedad. La Junta de Castilla y León ha anunciado que el Gobierno autonómico seguirá otorgando ayudas a las explotaciones afectadas por la Enfermedad Hemorrágica Epizoótica (EHE) durante este año, que serán concedidas de acuerdo con el protocolo establecido. Además, ha avanzado que se destinarán otros 10 millones de euros complementarios para las explotaciones que en 2023 no pudieron acogerse a estos apoyos.
En su última reunión, la Junta Directiva del Sindicato de Veterinarios de León (SIVELE-USCAL) ha acordado mostrar todo el apoyo técnico posible al sector bovino e instar a la Junta de Castilla y León, y al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, a establecer un plan biosanitario y de vacunación gratuito, así como a incrementar las ayudas económicas necesarias para mantener la viabilidad de las explotaciones ganaderas de Castilla y León