Huelga de limpieza en la ULE: entre el cabreo y las restricciones de acceso
La primera jornada de huelga ha dejado sabores encontrados entre las huelguistas y el personal de la Universidad de León. La basura y suciedad con la que amanecieron diversos puntos del campus de Vegazana y facultades han generado un cabreo generalizado entre el personal de la Universidad de León, que critica el exceso en el inicio de la jornada de huelga. Por contra las huelguistas consideran que su convocatoria ha sido un éxito y se mantiene unidas en su posición, si bien reconocen que ha podido haber algún exceso por parte de elementos incontrolados.
No obstante, este martes las facultades han abierto más limpias que en la jornada de este lunes debido a que la basura mayor ha sido recogida y limpiada por conserjes de los centros, tal y como ha podido atestiguar este periódico. En conversación con ileon.com alguno lo ha justificado por las condiciones de salubridad y no por ir contra la huelga o tener órdenes de limpieza del rectorado.
Pero lo más curioso de este segundo día de huelga del servicio de limpieza en la Universidad de León han sido las restricciones de acceso a los edificios del campus con las que se han encontrado personal y alumnos. Según diversas fuentes decanales consultadas la orden ha partido del rector, José Ángel Hermida, que ha sido quien ha ordenado cerrar las puertas auxiliares de los edificios y dejar abiertas sólo las principales para controlar los accesos e impedir la actuación de los piquetes. De hecho, las huelguistas denuncian que se les ha impedido el acceso esta mañana a alguna facultad por parte de miembro de sus equipos directivos.
El comité de huelga reitera que llevan un año pidiendo una reunión con Hermida y que ya han afrontado despidos, no renovaciones y una merma en sus derechos laborales. Acusan a Hermida de mentir en la disminución de la superficie a limpiar en el campus ya que sólo se ha cerrado la Escuela de Minas y parte del campus de Ponferrada. Por ello no entienden su empecinamiento en defender el recorte en el contrato del servicio de limpieza, que de aplicarse podría suponer despidos de entre el 30 y el 50% de la plantilla.
De momento el conflicto se mantiene sin novedades ni conversaciones entre las partes por lo que se apunta a su prolongación de forma indefinida.
