Filón Verde pide reubicación para los empleados de Nueva Julia
Los trabajadores de Nueva Julia, en Cabrillanes, han comenzado a manifestarse contra el Expediente de Regulación de Empleo presentado por la empresa ante la paralización de la explotación en cumplimiento del auto que acepta la solicitud de medidas cautelares solicitadas por los colectivos Filón Verde y Montañas de Babia y Luna, que han obligado a la empresa Coto Minero Cantábrico a paralizar las labores de extracción.
Los trabajadores han comenzado a recoger firmas con el fin d e hacer ver que “la única vía para esta zona es el cielo abierto”. Igualmente han manifestado que los miembros de asociaciones como Filón Verde son antíguos trabajadores ya jubilados que se han beneficiado de las prejubilaciones.
En respuesta a esto, Filón Verde ha hecho llegar a los medios de comunicación una nota de prensa en la que aseguran que “la paralización judicial de Nueva Julia ha generado una polémica inducida o provocada por la empresa infractora”, y añadiendo que “sus portavoces han asegurado en los medios de comunicación el pasado día 4 de febrero que los servicios jurídicos de la JCyL trabajan para subsanar los defectos administrativos que han llevado a la paralización de la mina, reconociendo explícitamente que la explotación no era legal”.
“Ahora se sirven de los trabajadores para echar la culpa al mensajero, con los argumentos empleados hace ya 11 años: somos unos prejubilados privilegiados y le tenemos manía personal al empresario”, declara Filón Verde en el comunicado.
“En Filón Verde hay de todo un poco: jubilados, prejubilados, amas de casa, viudas, industriales autónomos, trabajadores por cuenta ajena, estudiantes... Una representación social bastante amplia. Aunque públicamente aparecemos unos pocos, como en cualquier otro colectivo”.
La cuestión, han dicho, “no es urogallos o minas cielo abierto, la cuestión es ciudadanos de primera o ciudadanos de segunda. Los de primera son los que no suelen pagar por sus errores o desmanes, los que reciben trato de favor por parte de las administraciones públicas, los que siempre tienen una vía de escape para zafarse del imperio de la ley. Los de segunda somos todos los demás, la gran mayoría, los que pagamos impuestos, tasas o multas; con nosotros las administraciones son siempre rigurosas en los procedimientos y si nos equivocamos, solemos pagarlo caro”.
“A ver si ahora va a resultar, que los prejubilados, o jubilados, no van poder defender sus intereses particulares y también los generales que vienen a ser los mismos. Queremos seguir viviendo aquí, porque aquí están nuestras propiedades y familias y reclamamos calidad de vida para nosotros y los que lleguen en el futuro”.
“Por supuesto que respetamos y nos solidarizamos con los trabajadores de la corta Nueva Julia, a los que el empresario no ofrece más alternativa que un ERE, cuando esta empresa tiene capacidad organizativa, estructural y económica para recolocar a todos los trabajadores en otros centros de producción de la misma sin necesidad de solicitar esta regulación temporal, mientras solucionan esos pequeños defectos. Desde estas líneas pedimos de los responsables sindicales que, como ha declarado en algún medio CCOO, procuren para ellos estas reubicaciones a la mayor brevedad”, concluye Filón Verde en su comunicado.
