La tradición perdona a Manuela
Manuela M. ha sido la protagonista del tradicional acto del Perdón que como cada año en Martes Santo se ha celebrado en la capital leonesa. Al acto han acudido el alcalde, Francisco Fernández, el vivealcalde, Javier Chamorro, el subdelegado del Gobierno en León, Francisco Álvarez, y el delegado del Gobierno en Castilla y León, Miguel Alejo, entre otros.
La lluvia no ha supuesto ningún impedimento para que la cofradía del Santo Cristo del Perdón realizase el trayecto previsto. Los cuatro pasos tradicionales han desfilado por las calles de León, donde miles de leoneses se refugiaban bajo sus paraguas. Uno de ellos ha sido pujado por 14 presos.
“Hemos tenido muchos años en los que ha llovido a mares, y más de una vez terminamos mojados completamente” comentaba Roberto Fernández, viceabad de la cofradía, en declaraciones a ileon.com. Pero sólo dos veces la procesión no ha podido salir a causa de la lluvia: en 1970 y en 1978.
Al llegar a la abarrotada plaza de la Catedral, la procesión se ha situado frente a la pulchra leonina para esperar el ansiado perdón. El Abad ha sido el encargado de ir a buscar a la presa, que se ha vestido con el hábito marrón y con un fajín blanco de lana de la cofradía.
El Abad, en nombre de la cofradía, ha proclamado ante la imagen del Cristo del Perdón y ante el pueblo leonés la solicitud del indulto a favor del penado. El rito se ha celebrado frente al denominado Locus Apellationis, un pequeño fuste situado en el pórtico occidental de la Catedral de León donde en el medievo se celebraban los juicios de apelación.
Tras este acto simbólico, Manuela M., una mujer condenada a tres años de cárcel por tráfico de drogas pero ya liberada desde hace una semana, ha continuado junto a los cofrades el resto del camino.
Para la Hermandad, formada por 850 personas, lo más importante es que pueda asegurarse la reinserción de la persona. Según el viceabad, para solicitar el indulto la primero se debe recurrir al centro penitenciario, desde donde se otorga una terna de propuestas. La cofradía del Santo Cristo del Perdón valora las circunstancias humanas y decide quién será el preso seleccionado. Los requisitos son que tenga una condena firme, que no sea reincidente y que no haya estado involucrado en un delito de sangre. Pero el Ministerio de Justicia tiene la última palabra, es quien concede o no el indulto.
La procesión, que ha salido a las 18.45 del patio del Asilo de Ancianos Desamparados (c/ Corredera), ha sido la primera en pasar por la nueva prolongación de Ordoño II, construida tras la remoción del paso a nivel del Crucero y la inauguración de la estación provisional de Renfe.
El indulto solicitado por esta cofradía se concedió por primera vez en 1965, y se repitió todos los años hasta 1972. Luego, esta tradición fue dejada de lado, hasta que los cofrades decidieron recuperarla en 1998. En esta segunda etapa la única vez que no se consiguió fue en el año 2006, ya que fue denegado por las autoridades judiciales.
