Oxfam Intermón, un cuarto de siglo latiendo comercio justo en el corazón de León

El Barrio Romántico acoge un pequeño establecimiento que fue el primero de la capital leonesa dedicado al comercio justo y que, de la mano de Oxfam Intermón, cumple en este 2020 sus primeros 25 años de existencia. Voluntarios de esta Organización No Gubernamental son los encargados de gestionarla y atender a una clientela cuyas compras contribuyen a la labor social que desarrolla la entidad en distintos lugares del planeta.

María Caballero fue una de las que estrenó esta aventura de compromiso solidario y hoy, a sus 73 años, mantiene viva su ilusión. Algunas cosas han cambiado en todo este tiempo, pero la esencia es la misma: el espíritu de ayuda que les hizo sumarse a una institución que ya contaba en León con un grupo de personas comprometidas con los principios de la ONG.

La tienda se puso en marcha y ahora inicia su segundo cuarto de siglo de andadura, con el impulso de una veintena de personas que suman esfuerzo y dedicación para sacar adelante un espacio en el que se pueden adquirir numerosos productos, tanto para consumo propio como para añadir a cualquier regalo el valor de saber que contribuye a ayudar a quienes luchan por un mundo más justo.

Camisetas, pañuelos, pareos, toallas, monederos, bolsos, velas, jabones, pijamas, bisutería, objetos artesanos y decorativos, juegos, cestas, menaje, cosmética y una amplia oferta en alimentación, con el café como uno de los productos estrella, sin olvidar los chocolates, galletas, zumos, mermelada o paté e incluso algún vino de importación, conforman la amplia y diversa oferta que se presenta al cliente habitual -cuya fidelidad se premia con un descuento en cada compra- y al ocasional.

Camino Orejas, de 32 años, es voluntaria desde hace cinco años y detalla que la entidad, que lucha contra las desigualdades, aparte de trabajar con productores de otros continentes también lo hace en España, donde desarrolla distintas campañas -sobre todo de concienciación social y otras para reclamar compromisos a los gobiernos- y durante la pandemia “ha redoblado el esfuerzo y colabora con más de 40 organizaciones, por ejemplo, en el pago de alquileres y ayudas de emergencia”.

La propietaria del local que ocupan les ha rebajado el alquiler durante los meses de cierre, lo que les supone cierto alivio para afrontar la remontada. “Oxfam Intermón fue de los primeros en decir que la gente permaneciera en sus casas, pero a los productores se les ha seguido pagando, se les ha encargado la misma mercancía y se les ha pagado por adelantado, aunque no hayamos podido recibirla”, detalla Camino y recuerda que han tenido que retirar todo lo caducado mientras cumplían su compromiso con los productores, a los que se les abona de inmediato cuando se hace una compra.

Asia, Latinoamérica y África son los territorios en los que la ONG desarrolla una labor que tiene en las mujeres uno de sus pilares. “Oxfam lucha mucho por el empoderamiento de la mujer; es posiblemente la ONG que más lo haga en distintos ámbitos”, detalla y recuerda que el año pasado unas jóvenes nicaragüenses visitaron la ciudad para contar lo que hacen con el dinero procedente de la tienda de León; “cómo pudieron asociarse y cómo fomentan la mejora de sus derechos laborales y sociales”.

Son parte de las que integran las cooperativas, como las que apoyan en Uganda, en las que se ha conseguido que las mujeres puedan ser propietarias de la tierra que trabajan y en las que se elabora el café de la marca propia Tierra Madre. “Vendemos productos de calidad y respetuosos con el medio ambiente”, recalca.

Quinti de Paz, de 56 años, lleva unos siete años en Intermón. “Necesitaba hacer algo por los demás y surgió esto. Me gustó y aquí me siento bien. Pongo mi granito de arena”, comenta tras el mostrador en su turno de tarde. El horario provisional de la tienda es los miércoles y viernes de 11 a 13.30 y lunes, martes, miércoles y jueves de 17.30 a 20.30. Allí, en el corazón de León, demuestran con el ejemplo que hay causas que merecen la pena y que las ayudas -en este caso en forma de compras- llegan a su destino. “Lo que no llega es lo que no se da”, resume.