Cómo disfrutar del vermú perfecto en León

El vermú perfecto

Nuria V. Martín

¿Acaso hay algo que preste más que marcarte un ‘vermuteo’ con los amigos en un terracina bajo el solecín?

De Grecia a Italia y de ahí a Barcelona

Antes de nada, dejemos claro que tanto ‘vermú’ como ‘vermut’ son alternativas en español a la voz francesa ‘vermouth’ o ‘vermout’. Dicho lo cual, nos ponemos en contexto. Ya Hipócrates puso a macerar vino con flores y hojas en el 460 a.C. Pero nos tenemos que remontar al S. XIX cuando el italiano Perucchi en 1860 trae su receta a España, concretamente a Barcelona. Fue Yzaguirre, en 1884, el primer vermú cien por cien español. En los años 60 y 80, más cercanos a nuestros días, tuvo un gran auge, pero como en la actualidad casi todas las regiones españolas producen multitud de vermú con excelentes calidades y distintas peculiaridades, la afición ha renacido con fuerza.

Y de peculiaridades de estas bebidas vamos a hablar con Rubén Lera Lera, propietario del ‘Rua 11 desde abril de 2014. Un pequeño restaurante que cuenta con un gran servicio profesional y calidad, tanto en bebidas, tapas y raciones en el corazón de la Ciudad de León. “Nos especializamos en el vermú porque vimos un filón observando ciudades como Barcelona, Madrid e, incluso, en algunos locales de León y provincia”, relata el hostelero haciendo referencia a los orígenes de esta consumición.

En el centro de León

Pero volviendo a León, concretamente a la Rúa junto a la Calle Ancha, Rubén nos define a los leoneses como “muy vermuteros, tanto por la mañana como por la tarde-noche. Es verdad que los sábados y domingos por la mañana más, pero, aun así, hay un consumo alto en otros días y horarios”. Queda claro que no está claro cuando es el mejor momento para tomarte un buen vermú, porque cualquier situación con amigos y familia acompañada de unas tapas estupendas, como encurtidos o una gilda, es perfecta.

Rubén asegura que el vermú perfecto es el que le gusta al cliente según sus preferencias de sabor y características, ya sea rojo o blanco o con toques más dulces o amargos. Con tantas opciones en este local cuentan con 150 referencias, desde más comerciales a pequeñas bodegas. “Son muchos vermús los más demandados: tanto los clásicos, como los que han venido pegando fuerte, incluso los de nuestra tierra o los gallegos que, por sus cualidades, se beben muy bien para una amplia mayoría”, afirma.

Esas cualidades de las que habla el propietario de la Rúa 11 se consiguen gracias a la elaboración a partir de variedades autóctonas de vino macerados con decenas de extractos de hierbas, raíces, flores, especias y frutas, especias y frutas, tanto en soluciones hidroalcohólicas como por destilación. El vino permanece en barricas entre 8 y 18 meses, madurando hasta alcanzar el ‘bouquet’, aroma, que, precisamente, le caracteriza antes de ser embotellado.

Pero una vez que el vermú sale de su recipiente, después de un debido asesoramiento para garantizar el éxito, la puesta en escena también es clave para una degustación perfecta. Para ello, en el Rúa 11 no verás la típica aceituna. El vermú se presenta muy frío y acompañado de naranjas, limones o limas, manzanas y pomelos deshidratados que aportan a la consumición unos matices únicos en su aroma.

Y ahora cuéntanos en redes sociales si practicas el ‘vermuteo’ y cómo te gusta a ti.

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