Juegos, ciencias e historia local en la clase más divertida para escolares y sus familias
Los niños del Colegio Público de Hospital de Órbigo, junto con sus padres, convertirán esta localidad el próximo sábado día 18 de mayo en un enorme campo de juegos, en el que se mezclarán ciencias, matemáticas, arte e historia local gracias a una jornada intensiva que hará las delicias de los más pequeños y sus familias.
La llamada 'II Jornada de los Niños', enfocada a aprender jugando en familia, es un intenso día que aglutina diversión, ocio y aprendizaje en múltiples disciplinas, en el marco de esta villa medieval del Camino de Santiago.
Organizada por el AMPA 'Ramón y Cajal' del colegio público de Hospital de Órbigo, y con la colaboración imprescindible del Ayuntamiento, así como de las empresas leonesas 'Juega con la Ciencia' y 'Aloha Mental Arithmetic', está dirigida a todos los niños tanto de Hospital de Órbigo como de las demás localidades que conforman el colegio rural. Igualmente también habrá actividades destinadas a los más pequeños, los niños de la guardería municipal.
Este año el programa de casi doce horas ininterrumpidas está centrado en uno de los edificios más emblemáticos del pueblo: Villa Blanca, popularmente conocida como La Pajillera. Se trata de una antigua casa de indiano que, salvando las distancias, es el pequeño Taj Mahal de Hospital de Órbigo, ya que su fundador, D. Santiago Villamil, la construyó en honor de su amada, Dña. Blanca de Astorga. Y como casi todas las historias de amor de la villa, la de D. Suero incluida, acabó con la “misteriosa desaparición” de ella y el suicidio de él. O al menos así se relata en 'La invisible prisión', novela de Luis Alonso Luengo, escritor y cronista de la villa.
Posteriormente fue reutilizada y convertida en una llamativa fábrica que sobrevivió hasta los años 70 realizando fundas de paja de centeno para botellas con un éxito tan desmesurado como hoy casi olvidado. De ahí que a lo largo de este curso, los escolares hayan estado investigando sobre esta actividad industrial y desarrollando en torno a ella multitud de actividades que desembocarán en la jornada de este sábado.
El programa comenzará a las 10,00 horas con la “recogida de credenciales” de los niños inscritos, a la que seguirá un recorrido guiado por la exposición de dibujos alegóricos a esta fábrica que ellos mismos han realizado. Posteriormente descubrirán más secretos de La Pajillera de mano de sus pequeños autores y también las investigaciones de los mayores y las entrevistas con los antiguos empleados de tan original fábrica, mientras otro taller se centrará en pintura de dedos para los más pequeños.
A las 12,00 horas el primer taller organizado por María Teresa Álvarez de 'Juega con la Ciencia', en el que los niños se lo pasarán en grande y aprenderán el por qué de su pequeño mundo, realizando ellos mismos experimentos de física y química. Y a continuación, otra actividad lúdica pero súper divertida de cálculo con ábacos, en este caso a cargo de 'Aloha Mental Arithmetric'. Hasta las 14,00 horas se irán turnando pequeños y grandes y a partir de esa hora el divertido ejercicio mental a buen seguro dará buen apetito, así que lo mejor es una comida en la amplia y verde zona de las proximidades del campo de fútbol.
A las cuatro de la tarde se retomará la actividad, con mándalas, pinturas, recortes... y el ánimo añadido de exponer después todos los trabajos. El arte se alternará con nuevos experimentos e incluso un 'Taller de letras' para los mayores, antes de una proyección infantil que dará comienzo a las seis de la tarde.
El fin de fiesta será una animada merienda en el Centro Cívico, en la que cada familia echará el resto para deleitar a todos los demás asistentes con sus mejores especialidades.
La vocal del Ampa de Hospital, Natalia Cordón, encargada de la coordinación de la Jornada, anima a la participación tanto de los escolares como de sus padres, destacando que la convivencia y el aprendizaje común son valores esenciales tanto de la educación como de esta fiesta. Cordón, además, resalta que las actividades del curso y de este día “son una excusa muy divertida para que no olvidemos nuestras raíces locales y nuestros hijos aprendan, a base de divertidos experimentos, que la física, la química y las matemáticas pueden llegar a ser muy pero que muy divertidas”.
