La Diputación de León jamás contestó a 14 ayuntamientos que no podían invertir el millonario plan de instalaciones deportivas

Instalación deportiva de pádel y antes de frontón, en Navatejera, archivo.

Carlos J. Domínguez

Dos cosas han sido un desastre en uno de sus últimos planes estrella de inversión, el que debía repartir 3 millones de euros entre los ayuntamientos de León para reparar y mantener en condiciones sus instalaciones deportivas y que el equipo de Gobierno de PSOE y UPL impulsaron el pasado año 2022, en el mandato anterior.

La primera es que durante meses, la institución no ha dado respuesta de modo alguno, silencio absoluto, a las muchas dificultades que los ayuntamientos beneficiarios de las ayudas les indicaban que se encontraban para cumplir los requisitos de las bases, entre otros la necesidad de modificar los proyectos o memorias que habían presentado en el Palacio de los Guzmanes y que se les había subvencionado.

En esos meses de incomprensible silencio administrativo, la mayor parte de los municipios fueron tomando, de hecho, la decisión de renunciar a unas ayudas que podrían haberles entregado hasta 40.000 euros como máximo para para proyecto aprobado, y era un dineral como algunos ayuntamientos tenían varios de ellos y que cubrían el 90% del coste total de las obras.

Para los que tuvieron la paciencia de esperar la respuesta de la Diputación leonesa que nunca llegó hubo otro desastre más: los plazos corrían y nadie hacía nada por que se agotaran. De hecho, aunque el plan de instalaciones deportivas se aprobó en julio de 2022, el Pleno ya tuvo que ir retrasando los plazos de justificación de las obras y el tiempo para terminar las mismas numerosas veces: el 25 de enero de este año 2023, luego el 26 de abril y por último en octubre. La última fecha era inamovible: el 15 de diciembre todo tenía que estar presentado en regla, los trabajos terminados, o los ayuntamientos perderían todo el dinero concedido.

La lista de los 14 'pacientes'

Pues bien, hoy, sólo un día antes de expirar ese último plazo, es decir, este jueves 14, ha tenido que celebrarse un Pleno urgentísimo para acordar, con el apoyo final del equipo de Gobierno del PSOE y UPL, el voto del diputado de Vox y la abstención del PP, paralizar in extremis ese plazo. Así, a la carrera, han tenido que evitar así un efecto ruinoso en las arcas de los ayuntamientos beneficiarios un total de 14 que han desesperado todo este tiempo.

Al final, libran sobre la campana los municipios de Pozuelo del Páramo, Valverde Enrique, Villaquilambre, Carrizo de la Ribera, Castrocontrigo, Posada de Valdeón, Puebla de Lillo, La Robla, Santas Martas, Villagatón,  Valderrey, Villazala, Villafranca del Bierzo y Cimanes De la Vega.

Y en todo ese tiempo, “no se les dio respuesta”, admitió el portavoz socialista del equipo de Gobierno y alcalde de La Robla, Santiago Dorado, argumentando que “debemos de cumplir la Ley estrictamente”. Su homólogo popular, David Fernández, puso como condición para el apoyo del Grupo del PP a esta salvación que se pudieran acoger a este beneficio todos los municipios que, desesperados, habían renunciado por el camino a las ayudas económicas. Sin embargo, tanto la secretaria como el interventor, Cirenia Villacorta y Rafael de Benito y Benítez de Lugo, respectivamente, consideraron “imposible” la repesca, al haber estos municipios “renunciado a sus derechos”, e incluso aunque esa renuncia fuese debida a un de los casos de mayor negligencia que se recuerdan en la Diputación.

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