Villarrubia: “Sería mejor para todos si evitáramos los cantes que a veces damos”
El secretario general del PSOE de Castilla y León, Julio Villarrubia, afirmó este martes que sería mejor para todos si se evitaran los cantes que a veces da la formación, aunque como él mismo recordó es reticente a hablar de los asuntos internos del partido en público. Preguntado al respecto, eludió pronunciarse sobre el enfrentamiento que existe entre la ejecutiva provincial del PSOE en León y la local, que este martes organizó el acto en el que Villarrubia participó con militantes y simpatizantes del partido y al que no acudió el máximo responsable del partido en la provincia leonesa, Tino Rodríguez.
Villarrubia se limitó a señalar que “hace falta un esfuerzo de generosidad para intentar ir más allá de las discrepancias” -no aclaró de quién- y añadió que “hay que sumar porque el único adversario es el PP”. Invitado por la Agrupación Municipal del PSOE, su secretario general, José Antonio Díez, agradeció la permanente buena disposición del líder autonómico siempre que se acude a él y recordó que el acto es uno más de los que promueve el colectivo para fomentar la participación de toda la militancia en la vida orgánica del partido y para incentivar el debate.
Julio Villarrubia manifestó su satisfacción por compartir un tiempo con los compañeros de partido y poder repasar “las cosas que le importan a la gente”. En ese sentido, incidió en la preocupación que a su juicio existe por la reforma local en toda la Comunidad y especialmente en la provincia de León y recordó que el PSOE pedirá el apoyo del PP en las Cortes en el recurso de inconstitucionalidad que plantean presentar contra la norma estatal.
También situó en la cúspide de las preocupaciones de los ciudadanos el empleo “y la contrarreforma indecente de las pensiones” y criticó el “ataque despiadado y vergonzoso a los derechos de los españoles”, que para el PSOE supone tanto la Ley de Seguridad Ciudadana promovida por el ejecutivo de Rajoy como la reforma del Código Penal. También lamentó el peligro de desaparición de los partidos judiciales, que en el caso de León podría limitar a la capital el único que permanecería activo.
