Rodiezmo, tres años sin fiesta minera asturleonesa
Desde 1979 hasta 2012 la campa de Rodiezmo se convirtió de la mano del poderoso sindicato SOMA-FITAG-UGT en una cita ineludible con la celebración de la Fiesta Minera Astuleonesa, que cada primer domingo de septiembre llenaba hasta los topes la localidad leonesa frontera con el Principado.
Rodiezmo juntaba a las dos principales minería del país, la leonesa con empresas privadas y la asturiana cuyo fuerte era la empresa pública Hunosa. Dos minería que en ocasiones han rivalizado en intereses pero que confluían en esta cita anual para reforzar lazos y garantizar, aunque no siempre, unidad de acción contra los recortes que los sucesivos Gobiernos han ido aplicando desde los años 80 contra el sector minero.
La fiesta se convirtió en 2004 en un imprescindible de la política nacional al ser escogida por José Luis Rodríguez Zapatero como lugar para abrir el curso político tras el parón veraniego. Una cita que se interrumpió en 2010 con la crisis a cuestas, una huelga general al socialista y los puentes sindicales rotos con el PSOE por los primeros recortes de la nueva política económica de austeridad que ha traído esta crisis. Una ruptura de la que la fiesta ya no se recuperaría, languideciendo en los añós 2011 y 2012 ya sin ser noticia de alcance nacional y con el incombustible Alfonso Guerra como principal aliciente político del acto minero. Esta fiesta se llevaba celebrando ininterrumpidamente desde 1979 y sólo en 1995 por un accidente en un pozo de Hunosa en Mieres se canceló debido al luto por los catorce trabajadores fallecidos.
Alfonso Guerra animó en los úlitimos años la Fiesta Minera Asturleonesa de Rodiezmo.
En el 2013 la fiesta dejó de celebrarse, con unas razones por parte del sindicato minero muy difusas, aludiendo a la difícil situación económica general y por el complicado momento que atravesaba el sector del carbón con las primeras medidas de recorte del Gobierno de Mariano Rajoy al sector, que aún hoy en día sigue en una situación de extrema gravedad. En el 2014 las razones fueron idénticas “ante la situación económica actual y la incertidumbre a la que el Gobierno central tiene sometida a la minería”. El coste de organizar un evento de esta características, que reunía a miles de personas cada año, también fue uno de los motivos para suspender la tradicional fiesta. Y este 2015, sin nada que celebrar en el sector, la fiesta ha vuelto a suspenderse en lo que parece una decisión que convierte a Rodiezmo en parte de la historia política y sindical del país.
Lo cierto es que SOMA-FITAG-UGT tampoco está este año para muchas celebraciones tras el escándalo desatado por su histórico líder José Angel Fernández Villa al acogerse a la amnistía fiscal de 2012 y aflorar un patrimonio ocultado a Hacienda de 1,4 millones de euros. El escándalo saltó en octubre del 2014 y provocó una crisis política sin precedentes en el Principado porque la figura de Villa, venerada sin rubor durante su mandato sindical, era una de las más influyentes en la política asturiana, con un gran ascendiente en particular sobre el PSOE. Actualmente la Fiscalía Anticorrupción mantiene abierta una investigación sobre cómo el líder sindical pudo acumular esa fortuna ajena al fisco.
Sin la fiesta minera Rodiezmo es ahora una localidad mucho más tranquila, ajena al ajetreo que durante algunos años la convirtió en lugar de interés para la política nacional. Con la lenta agonía del sector minero la fiesta se fue, y cada vez hay más dudas de si alguna vez volverá.
