El PSOE leonés busca caras nuevas para la reconstrucción

Elecciones 20 N Alonso

J.M. López

La intervención de José Luis Rodríguez Zapatero en las últimas horas, tanto para admitir y asumir en primera persona la más que evidente derrota en las elecciones, como para anunciar el congreso ordinario en febrero para recambiar la actual dirección federal, ha sido recibida entre buena parte de la militancia, más bien con indiferencia. No pocos esperaban un paso más y que José Luis Rodríguez Zapatero anunciara el final definitivo de su ciclo, que se ha saldado con uno de los peores resultados de la historia del socialismo en España; en León fueron casi 70.000 las personas que en cuatro años han dado la espalda a la lista encabezada por José Antonio Alonso.

Salvando las distancias lógicas, tanto en Madrid como en León la familia socialista tiene claro que para resurgir de las cenizas debe encontrar nuevas caras, gente con experiencia pero sin deudas con anteriores ejecutivas y capaces de volver a ilusionar a millones de ciudadanos; los que en su día les otorgaron el voto de la confianza. Pero, por muchas razones, no va a resultar sencillo.

En León el PSOE ha quedado muy mal herido y algunas maniobras de las últimas horas no han sentado nada bien entre algunos de los cargos institucionales. Y en este sentido no pocos socialistas denuncian la extraña irrupción del subdelegado del Gobierno, Miguel Alejo, en los medios de comunicación para hablar de cuestiones de partido, dado que durante los últimos ochos nunca entró en este territorio, más allá de las manifestaciones propias del cargo.

Las críticas a Miguel Alejo se extienden al antiguo secretario provincial Miguel Martínez a quien algunos concejales y cargos públicos acusan veladamente de pilotar una maniobra para devolver a la FSL al pasado. No se trata de echar a nadie, sino de aprovechar la difícil situación que han resuelto las urnas para empezar no de cero pero si desde abajo, tal y como han señalado destacados representantes que por el momento prefieren mantener en silencio sus nombres.

No hay duda; todos deben prestarse al diálogo sean quienes sean los interlocutores si quieren iniciar la reconstrucción; pero está claro que en esa mesa de diálogo estarán nombres como Miguel Ángel Fernández Cardo, Iban del Blanco, tal vez José Antonio Díez, Vicente Canuria, María Rodríguez, Ana Alonso Durán o Nicanor Sen (que no cuenta con el apoyo de otros alcaldes, tal vez porque se le vio demasiado cerca de Zapatero en algunos momentos, o simple recelos). Nadie duda que el Bierzo, aislado por la actual ejecutiva provincial, debe jugar un papel importante en la refundación del socialismo, leonés.

¿Alonso?

La gran incógnita de este proceso del que no se han dado aún los primeros pasos de forma oficial, pero si se han mantenido los primeros contactos, es saber qué determinación adoptará el cabeza de lista José Antonio Alonso. “Si no se arregla lo suyo en Madrid no sería difícil que le viéramos pugnando por la secretaria provincial del partido”, ha señalado a este periódico un alto cargo socialista. Es decir un vez que se decida el nuevo organigrama y reparto de papeles entre los 110 diputados socialistas, se sabrá que camino decide emprender Alonso. Junto a él podrían alinearse nombres de sobra conocidos y que tienen en común que en breve deberán abandonar el cargo que ocupan, en algunos casos desde hace ocho años.

Pero esta idea no ha dejado indiferente a casi nadie porque muchos socialistas leoneses estiman que no pueden emprender ni liderar la reconstrucción del partido con las mismas personas que lo han llevado a la debacle; las decenas de miles de votos perdidos este domingo no dejan demasiado margen para las conjeturas.

La convocatoria de un congreso federal ordinario, en febrero, puede abrir un periodo de negociación que permita que los primeros contactos telefónicos se conviertan en foros de debate para dar un lavado a fondo a la FSL, rota, dividida en varios grupos sin apenas contacto y sin una cara nueva que pueda asumir y representar el cambio.

Aunque hasta febrero las espadas estarán templadas, la Ejecutiva Federal actual sabe que para evitar fricciones internas tiene que agilizar la renovación cuanto antes y que para ello necesita un nuevo lider. Una persona que sea capaz de afianzar y de estabilizar y no sea el resultado de un enfrentamiento entre partes. El nuevo secretario general del PSOE no puede ser elegido por un estrecho margen de votos.

A tenor del resultado, si en algún momento hubo opción para los dos López (Oscar y Patxi) ambos se han caído de las quinielas como ya sucedió en su momento con Carme Chacón, que además de catalana es mujer, y corrobora que en España ni PSOE ni PP están dispuestos a que una mujer sea la secretaria general del partido, y mucho menos candidata o presidenta del Gobierno. Aún queda mucho trayecto por delante.

Etiquetas
stats