Perandones anuncia su renuncia a la candidatura del PSOE
“Mi labor en el ayuntamiento finaliza el próximo mes de junio, y hasta el último minuto seguiré con la misma ilusión y entrega del primer día”. Juan José Alonso Perandones, alcalde de Astorga, anunciaba ayer en una carta a los vecinos de la ciudad su renuncia a presentarse como candidato del PSOE en las municipales del próximo 22 de mayo.
En ella, el regidor socialista -que lleva más de 20 años al frente del Ayuntamiento astorgano- asegura entre otras cosas que “no es una decisión el no concurrir a las próximas elecciones locales que yo haya tomado estos días precipitadamente, obviamente, sino que tal posibilidad me la planteé el mismo día en que volví a salir elegido alcalde en 2007”.
A continuación reproducimos la misiva enviada por el alcalde:
Queridos astorganos y astorganas:
El próximo 22 de mayo todos tenemos la obligación de cumplir nuestro compromiso con la ciudad, que es elegir a nuestros representantes en el Ayuntamiento por un periodo de cuatro años.
Ha sido mi costumbre el respetar los plazos electorales fijados por la ley; por ello, hasta que no se aproximan las elecciones no manifiesto públicamente cuál es mi propósito sobre si concurriré a o no a las mismas.
Nací en esta bella ciudad y desde muy pequeño la he añorado, he seguido su vida cotidiana con pasión, he respirado y disfrutado su atmósfera de colores azules e incandescentes; me han dado gozo sus nobles edificios y lontananzas; he respetado sus costumbres, sus tradiciones, y también me he quejado por sus carencias, por sus necesidades.
Por ello, en su momento pensé que debía aportar mi grano de arena para intentar mejorar, con mis compañeros, y como otros ciudadanos hacen en otros ámbitos, la ciudad en que vivimos todos.
La primera vez que, elegido, entré por las puertas del noble edificio consistorial, dejé grabados en mi conciencia el valor de la 'palabra empeñada' y los principios que iban a regir mi dedicación a los demás en el ayuntamiento; también, que mi responsabilidad municipal no se podía compartir con otros cometidos en otras instituciones públicas.
La labor de un alcalde, por su intensidad, por su cercanía, sigo pensando que requiere mucha templanza, mucha entrega y voluntad. No ha de ausentarse sino estar muy presente cada día en la calle, en el despacho, en la puerta de otras administraciones, para atender los asuntos mayores y cotidianos de la ciudad; y debe en cualquier momento estar dispuesto a tragarse y a alojar en sus entrañas los rapapolvos y disgustos (como bien se dice, eso va en el cargo).
Mi firme propósito siempre ha sido finalizar mi labor con la misma ilusión que la empecé, y, asimismo, el dar fin a esta etapa de mi vida en el momento en el que intuyese que mi capacidad de trabajo podía no ser tan intensa como los ciudadanos se merecen; y, con la perspectiva de cuatro años por delante, eso percibo claramente que ocurriría si permaneciese una legislatura más en el ayuntamiento.
Aquellos astorganos que aprecian mi labor comprenderán que un cometido de tanta responsabilidad como es el de alcalde requiere, si es prolongado, un gran esfuerzo y dominio de las emociones.
He procurado tener una conducta leal con todos ustedes durante estos años, y con esa lealtad que les debo quiero finalizar mis responsabilidades municipales.
Mi labor en el ayuntamiento finaliza el próximo mes de junio, y hasta el último minuto seguiré con la misma ilusión y entrega del primer día. No es una decisión el no concurrir a las próximas elecciones locales que yo haya tomado estos días precipitadamente, obviamente, sino que tal posibilidad me la planteé el mismo día en que volví a salir elegido alcalde en 2007.
A los más cercanos ya les manifesté el hecho probable de que esta sería mi última legislatura, y de forma oficial a mi partido en Astorga lo hice el 10 de enero del presente año, a las secretarias general y de organización, y a quien fuera fundamental para nuestra Agrupación Socialista y para nuestro trabajo, José Agustín González (Johnny); les agradezco enormemente su confianza y discreción. Pido disculpas a cuantos me han preguntado por mis intenciones en estos últimos meses y les he contestado con evasivas.
Acabamos de entrar en una primavera que será fecunda, y aún quedan más de dos meses de intenso trabajo. La ciudad tiene en ejecución importantes obras y proyectos que no se pueden descuidar ni un solo día. Por lo tanto, no es aún el momento de despedirme, tampoco de hacer un balance de cómo estaba y qué tenía Astorga cuando entré por primera vez en el ayuntamiento y cómo está y qué tiene en la actualidad. Indudablemente, que yo conservo en la memoria y en la retina cada rincón de la ciudad, aquella ciudad y esta ciudad, lo realizado en los pueblos, pero no es hora de hacer un balance de los aciertos y de las carencias.
Hoy y mañana lo que me corresponde es seguir con la misma ilusión y entrega del primer día, planteándome cómo responder a la confianza que muchos de ustedes en mí han depositado; cómo respetar y merecer la colaboración de todos. Voy, pues, a seguir trabajando, atendiendo los importantes asuntos que la ciudad ahora tiene en marcha, hasta el último momento, como ha sido y es mi obligación.
Con todo mi afecto,
Juan José Alonso Perandones, alcalde de Astorga
