El nuevo Plan de Cohesión Social trabajará para que extranjeros y locales asuman la integración como una obligación
El IV Plan Estratégico de Cohesión Social 2018-2021 trabajará para que la sociedad asuma el hecho de que la integración es un objetivo cuya responsabilidad y obligación es tanto de la población extranjera como de la autóctona. Así figura en el borrador del texto, cuya redacción acaba de finalizar el Grupo de Trabajo de Inmigración, y que pretende ser la hoja de ruta de todas las administraciones y entidades que trabajan en favor de la integración de las personas inmigrantes, de manera que las acciones de todas ellas avancen en la misma línea.
En el proyecto se recogen una pluralidad de medidas agrupadas en distintas áreas de actuación como coordinación, fomento de la igualdad de oportunidades, sensibilización social y gestión de la diversidad cultural, salud y asistencia sanitaria, educación, empleo, servicios sociales o cultura y deporte.
El grupo de trabajo ha buscado que sea un plan sencillo, con medidas concretas. Por este motivo, contiene aquellas medidas orientadas específicamente al objetivo de la integración o bien que, siendo destinadas a la ciudadanía en general, cuentan con alguna peculiaridad orientada precisamente a alcanzar el objetivo general de la integración con las personas inmigrantes o algunos de los objetivos parciales del plan, como el acceso real de las personas inmigrantes a los servicios básicos, la integración laboral o la participación activa de inmigrantes.
En el área de educación, se pretende reforzar aún más la coordinación de profesionales de los centros así como la participación de las familias para la consecución de la integración en los centros escolares. Además, se prevé la colaboración por parte de la Consejería de la Presidencia en la traducción de títulos académicos para que personas inmigrantes con pocos recursos económicos puedan homologarlos y convalidarlos.
Mayor control laboral
En el área de empleo, destaca como novedad la previsión de un mayor control por parte de la Inspección de Trabajo y Seguridad Social para garantizar la igualdad de condiciones laborales de las personas inmigrantes en aquellos sectores donde predomina mano de obra extranjera, agricultura y construcción especialmente. En lo que respecta al área de cultura y deporte, la principal novedad es la promoción de un modelo deportivo lúdico y educativo basado en los valores de respeto que erradique manifestaciones violentas de carácter racista, xenófobo o intolerante.
De acuerdo con los últimos datos estadísticos, son 128.633 los extranjeros que residen en Castilla y León, lo que supone el 5,26 por ciento de la población total en la Comunidad y el 2,79 por ciento de extranjeros que residen en toda España. Este nuevo texto dará continuidad al trabajo que se viene realizando desde la Junta de Castilla y León para promover la integración con el colectivo inmigrante, un trabajo que se inició fundamentalmente a raíz del 'Acuerdo sobre desarrollo del Diálogo Social en Castilla y León' y que ha tenido continuación en los sucesivos planes en materia de inmigración aprobados desde el año 2000.