Llorente cree que existe “mucha alegría en la Diputación” y “mucha tristeza en los pueblos”

I.R.

No piensa dimitir. Matías Llorente, diputado adscrito al Grupo Mixto, ha calificado de “circo de marionetas” la protesta que escenificaron este miércoles un grupo de la junta de personal de la Diputación de León durante el pleno de esta institución. Estos trabajadores mostraron pancartas en las que se pedía su abandono de la política por haber llamado prebendas a lo que ellos consideran que son derechos adquiridos a lo largo de muchos años. “Se vio muy claramente que estos estaban manejados, creo que la rosa marchita está detrás de todo esto”, ha denunciado Llorente en rueda de prensa. “Mi dimisión la puede pedir cualquiera, pero yo dimitiré cuando los míos no estén conmigo”, advierte.

Llorente se refirió a las “prebendas” en la sesión de la pasada semana cuando aseguró que estas partidas -destinadas a becas, formación y adquisición de viviendas- deberían ser suprimidas de forma progresiva. En su intervención de este viernes ha reiterado su posición dejando claro que “hay excesiva alegría en esta institución y excesiva tristeza en los ayuntamientos de menos de 20.000 habitantes”. Y matizó la diferencia: “De las prebendas se benefician unos pocos y los derechos son de todos los trabajadores”.

Estas ayudas que reciben funcionarios y personal laboral son fruto de un convenio que finaliza en junio. La Diputación había recortado este año el presupuesto destinado a esta materia, pero una alegación de los sindicatos obligó a reconocerse una partida de 370.000 euros en virtud de dicho convenio.

La intención de la institución es, por tanto, acabar con estos beneficios, una postura que comparte Llorente, para quien resulta “difícil de justificar cuando las escuelas de nuestros pueblos no tienen para hacer las reparaciones”. Además, ve incoherente que estas ayudas las reciban todos los trabajadores de la institución, independientemente del montante de su sueldo. Las pueden recibir los funcionarios de plantilla, los hijos de personal funcionario, hijos de jubilados o huérfanos del personal y los cónyuges de los trabajadores. En total en la Diputación hay 1.200 funcionarios, de los que el 45% ha accedido a estas ayudas.

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