Mañueco activa al PP de León para las elecciones autonómicas con Suárez-Quiñones al frente y como principal lastre
El Partido Popular de León activa formalmente este martes la precampaña para las elecciones autonómicas de Castilla y León, previstas para el mes de marzo, con una reunión de alcaldes y portavoces del PP de El Bierzo del presidente de la Junta y candidato a la reelección, Alfonso Fernández Mañueco
No es la primera reunión que los máximos responsables municipales del PP provincial tienen, pero sí la primera con la precampaña de Mañueco ya lanzada. Y la primera actividad del partido y la precampaña juntos de Mañueco y el consejero de Medio Ambiente, Juan Carlos Suárez-Quiñones, tras los incendios del pasado verano que han llevado al primer plano de la polémica política la gestión del operativo antiincendios.
En el acto del PP participarán Quiñones como presidente de la gestora del partido, un cargo al que llegó en verano tras la salida del puesto de la portavoz del PP en el Congreso, Ester Muñoz, y en el que también intervendrá el alcalde de Ponferrada, Marco Morala. Bajo el lema 'Aquí menos ruido y más nueces', Mañueco y el PP autonómico lanzaron su campaña a ritmo de jazz y el candidato a la reelección está de ruta por todas las provincias para reactivar a los cuadros municipales ante las elecciones, fundamentales en la movilización histórica del partido.
En esta ocasión el PP ha elegido El Bierzo para la visita, donde la disputa por los votos será muy elevada con el PSOE y donde históricamente el leonesismo de UPL ha sido más débil. Los populares creen que pese a las críticas recibidas por la gestión de los incendios en verano y la falta de asunción de responsabilidades políticas por los mismos, pueden repetir los cuatro procuradores actuales que tienen por la provincia leonesa. Sea quien sea el candidato.
Porque uno de los asuntos que circula por los cuadros municipales es si el presidente de la gestora y cuestionado consejero de Medio Ambiente puede ser otra vez número uno de las listas del PP por León. Buena parte del partido considera que con su gestión está “quemado” políticamente, es el blanco habitual de las críticas de la oposición y los bomberos forestales, pero todos asumen que la decisión de su puesto será exclusivamente de Mañueco. El presidente del PP autonómico ha respaldado su figura públicamente en varias ocasiones desde los incendios, una en las Cortes de Castilla y León con un “Sí, le apoyo”, y otra recientemente en una entrevista en la televisión autonómica.
Pero una cosa son los hechos políticos y otra la vida real. El consejero de Medio Ambiente ha evitado protagonizar actos públicos en León desde los incendios, cuando ya desapareció varias semanas de la esfera pública centrado en el Cecopi y la gestión posterior, e incluyendo alguna cancelación a actos previstos. El PP de León tiene un presidente, interino, al que le está costando salir a la calle, lo que es un grave problema para hacer una campaña. Los populares confiaban en que el tiempo dejara de lado la polémica de los incendios, pero no parece que la oposición ni los trabajadores del operativo van a dejar que la cuestión amaine. Suárez-Quiñones ha sido el acompañante habitual en León de todos los actos del presidente Mañueco pero no apareció, por ejemplo, en el respaldo a la Facultad de Medicina de la Junta, uno de los principales actos de la precampaña de los populares.
Mañueco y la Junta han intentando aparcar la polémica del operativo con una promesa y dos decretos, además del aluvión de fondos para paliar los efectos del desastre de más de 150.000 hectáreas arrasadas, principalmente en León y Zamora. La promesa es que en tres años el operativo será 'público', entendiendo como tal que los trabajadores dependan de empresas públicas como Somacyl o Tragsa, lo mismo que hace actualmente el Ministerio para la Transición Ecológica con sus brigadas BRIF. Pero lo que se ha llevado de momento son críticas generalizadas a los decretos por no negociarlos, desconfianza en las promesas y que la lucha contra el fuego se base en rebajar normas medioambientales.
El panorama interno del PP de León sigue siendo complejo, con un nutrido sector crítico que mantiene posiciones contrarias a las del núcleo duro que rodea a Quiñones: el delegado territorial de la Junta, Eduardo Diego, y el alcalde de Astorga, José Luis Nieto. La configuración de la lista electoral será uno de los 'tragos' del partido en el que Mañueco tendrá que emplearse a fondo para no crearse más problemas, y más ante unas elecciones. Al margen de la situación de Suárez-Quiñones, por ser el responsable del operativo y centro de las críticas, sería raro una posición muy desplazada para el portavoz del partido en las Cortes, el leonés Ricardo Gavilanes. Aunque cosas más raras se han producido en el PP leonés, como puede atestiguar el exalcalde de León Emilio Gutiérrez.
El PP de Castilla y León se ha quedado solo en la falta de asunción de responsabilidades por las críticas a una gestión de una situación grave. En Andalucía cayó la consejera de Sanidad y varios cargos de la consejería por la crisis de los cribados de cáncer de mama. En la Comunitat Valenciana el presidente Mazón ha presentado ya su dimisión, aunque haya sido un año después de la dana, ahora en plena negociación de su sustituto entre PP y Vox, y la consejera de Emergencias fue dimitida a las pocas semanas, actualmente imputada en el caso que investiga la gestión. En Castilla y León los máximos responsables del operativo, Suárez-Quiñones y el director general de Patrimonio Natural y verdadero cerebro del sistema desde hace dos décadas, José Ángel Arranz, siguen en sus puestos sin visos de cambiar a corto plazo.
Si las negociaciones en Valencia entre PP y Vox fracasan en los próximos días se abocaría a elecciones en cuatro meses, más o menos coincidentes con las de Castilla y León, lo que pondría la gestión de las emergencias en el primer plano. Un contexto que no parece, a priori, que vaya a favorecer al PP.
