La Junta defiende que las cuentas para Educación apuestan por el refuerzo docente y el bilingüismo

El consejero de Educación, Fernando Rey, destacó este martes que las cuentas de su departamento para 2018 apuestan por reforzar la calidad educativa a través de la mayor convocatoria de plantilla docente en los últimos años con 1.533 plazas; los 521 centros de bilingüismo que sitúan a Castilla y León como segunda comunidad con mayor porcentaje de este tipo de alumnos; los proyectos de internacionalización y el apoyo a la mejora de la enseñanza universitaria y la investigación.

En este sentido, señaló en su comparecencia ante la Comisión de Hacienda para explicar el presupuesto que con los 2.044.529.152 euros presupuestados “se supera por primera vez la barrera psicológica” de los 2.000 millones desde 2011 “y la cifra se va a acercando a los niveles presupuestarios más altos alcanzados desde el inicio de la crisis”. Con ello, y el aumento de 68,1 millones respecto a 2017, un 3,65 por ciento más, sostuvo que se intenta cumplir el objetivo de “educar bien para todos en Castilla y León” en base a las premisas de calidad en la oferta educativa, equidad en las oportunidades para los estudiantes y empleabilidad al concluir los estudios.

El consejero consideró en su intervención que se afrontan “inversiones necesarias para ampliar la solidaridad con los ciudadanos que más lo necesitan, administrando los recursos con responsabilidad, prudencia y eficiencia” Para ello, recordó que se necesitan medios materiales y humanos adecuados y, en ese sentido, se destinan más de 1.900 millones de los 2.044 presupuestados, el 93,44 por ciento del presupuesto, a gastos derivados del servicio educativo entre personal; funcionamiento; obra nueva, ampliación y mejora de centros; y servicios complementarios de transporte y comedores escolares.

Aquí, en este apartado, destacó los 1,1 millones en 2018 para salarios de docentes, 15,8 millones más que un año antes, y que en 2017 está publicada la mayor oferta de empleo público de los útimos años con 1.533 plazas, de las cuales 33 serán para maestros y 1.200 para el resto de cuerpos docentes, materiazándose estás últimas en la convocatoria de 2018.

Rey puso de manifiesto que la Consejería tiene como uno de sus obtetivos primordiales que “los alumnos de Castilla y León sean capaces de dominar, al menos, un segundo idioma al finalizar la Educación Escundaria”. Para ello, dijo, se cuenta con 521 centros bilingües, con 610 secciones, 37 centros British y 294 auxiliares de conversación. En conjunto, todas las medidas de apoyo al bilingüismo y la internacionalización en general del sistema educativo suponen para la Consejería 27,1 millones de euros. En el conjunto de España, Castilla y León es -detrás de Asturias- la segunda comunidad española con mayor porcentaje de enseñanza bilingüe.

Universidad e investigación

El titular de Educación se refirió además al presupuesto destinado a la mejora de la calidad educativa de enseñanza universitaria y de la investigación. A estas dos cuestiones se dedicarán un total de 406 millones, lo que supone un incremento del 8,41 por ciento, con 31,5 millones de euros más que el año anterior. “Es preciso resaltar un año más la situación equilibrada de las universidades públicas consiguiendo tener uno de los niveles más bajos de endeudamiento del país, mediante convenios saneamiento financiero con Salamanca, León y Burgos, que han dado un resultado mejor del esperado y que están próximos a concluir su vigencia”, aseveró.

En cuanto a la internacionalización se refirió a los intercambios escolares con regiones de Canadá, Francia y Alemania, junto a la movilidad tanto de alumnos como profesores en el campo de la FP y de las enseñanzas artísticas profesionales y superiores en los programas europeos Erasmus+. En este sentido, Rey anunció que uno de estos proyectos denominado 'Evalúate' “ha supuesto que se elija a Castilla y León ”como ejemplo de buenas prácticas en política educativa “ por la Asociación Europea para la Educación Internacional, que ha invitado a la Consejería a participar como conferenciante principal en su XXX Congreso Anual en Ginebra en septiembre de 2018.

En cuanto a las líneas de apoyo a la I+D, el consejero quiso resaltar que se aumentan en un 60,71 por ciento llegando a los casi 47,6 millones, y una de las novedades de mayor calado es la nueva convocatoria de ayudas destinadas al fortalecimiento de estructuras de investigación excelentes, con un importe total de 15,6 millones para el periodo 2018-2020. “Se trata de ayudar a los mejores actores autonómicos, de las universidades públicas o del CSIC, para subir un peldaño más en la escalera de la excelencia y poder competir con los mejores primero a nivel nacional y luego internacional”, detalló.

Reducción de tasas y libros de texto

Con las críticas de la oposición como telón de fondo al considerar que el coste sigue siendo muy alto, con respecto a los años previos a la crisis, Fernando Rey se refirió a la reducción de las tasas de acceso a los estudios universitarios. “Vamos a ir bajando los precios públicos en las universidades hasta equipararlos a nivel nacional en primera matrícula para que en el curso 2018-2019 lleguen al cinco por ciento, según la pactado con Ciudadanos. Se llegará al 45 por ciento de nuestros alumnos, los de mayor renta, ya que el 55 por ciento con menor nivel de ingresos y rendimiento académico adecuado no paga matrícula alguna al beneficiarse de becas estatales o autonómicas”, precisó. En becas Erasmus dijo igualmente que se mantendrá el complemento autonómico.

Sobre los apoyos para adquirir libros de texto habló del programa Releo Plus puesto en marcha este año para fusionar y generalizar los sistemas existentes con las ayudas a la compra y el banco de libros para préstamo. “Si bien el nuevo programa no es perfecto, y estamos sufriendo algunos problemas propios de la innovación y complejidad, creemos que ofrece ventajas frente a lo anterior y estamos trabajando para mejorarlo con la experiencia en los próximos años”.

El objetivo de la Consejería es ir avanzando hacia la gratuidad de libros en las etapas obligatorias y, para el próximo curso 2018-2019, se aumentará el umbral de renta hasta 2,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), lo cual supondrá cubrir cerca de la mitad de los escolares, casi 100.000 beneficiarios. Para ello, se destinarán 15,5 millones de euros, a los que hay que sumar la subvención en especie que supone el préstamo del banco de libros del fondo de cursos pasado.

En torno a la cuantía destinada a becas y ayudas al estudio recordó que creció en tres millones de euros, un 14,43 por ciento, hasta los 23,7 millones con los acuerdos alcanzados tanto en el seno del Diálogo Social como con el Grupo Parlamentario de Ciudadanos en las Cortes.

En cuanto a los libros de texto, el objetivo de la Consejería es ir avanzando hacia la gratuidad en las etapas obligatorias y, para el próximo curso 2018-2019, se aumentará el umbral de renta hasta 2,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), lo cual supondrá cubrir cerca de la mitad de los escolares, casi 100.000 beneficiarios. Para ello, se destinarán 15,5 millones de euros, a los que hay que sumar la subvención en especie que supone el préstamo del banco de libros procedente de la inversión realizada en cursos anteriores.

Respeto y aulas seguras

Rey destacó también en equidad educativa que se sigue manteniendo la idea de conseguir centros donde haya respeto y aulas seguras. “Seguiremos aplicando el 'Plan antiacoso y por el buen trato' y se mantendrán las actuaciones de apoyo al profesorado, reforzándolas mediante la pronta publicación de un protocolo de actuación en casos de agresión”, apuntó. Dentro del II Plan de Atención a la Diversidad, destacó los programas como los centros bilingües y tecnológicos (BITS) o los 'centros 2030', que contarán con un presupuesto de 225.000 euros. Además, se destinarán 120.000 más a una línea nueva que se inició el año pasado con minorías étnicas, inmigrantes o colectivos en situación de vulnerabilidad, para evitar el abandono escolar.

Aunque el consejero reflejó que el sistema educativo público funciona “con buenos resultados en base a los informes nacionales e internacionales y que se complementa con los conciertos privados de forma ejemplar desde hace muchos años con libertad de elección de centros”, un sector de la oposición no se mostró de acuerdo al entender que los colegios públicos deben tener más recursosy profesorado.

El presupuesto que se destina a los conciertos educativos se acerca a los 280 millones de euros. “Las necesidades reales en esta rública de conciertos educativos es 300 millones y será necesario incorporar crédito de remanentes. Aunque este año se deberá incorporar casi 20,5 millones, la cantidad es inferior en casi 13 millones a la incorporación que ha sido necesaria en 2017”, apuntó Rey.

Finalmente, el consejero de Educación abordó el objetivo de la empleabilidad, al que el presupuesto de 2018 destinará un total de 5.196.231 euros en cuatro ámbitos. Se trata del acercamiento de la Formación Profesional al mundo laboral; las relaciones universidad-empresa, con participación clave de la Fundación Universidades y Enseñanzas Superiores de Castilla y León (Fuescyl); las oportunidades de empleo para los egresados; y la mejora de la empleabilidad de los adultos, mediante formación o a través del reconocimiento de cualificaciones profesionales.

Críticas de la oposición por las altas tasas universitarias y los conciertos educativos

No obstante, los grupos de oposición en las Cortes autonómicas, salvo Ciudadanos, que consideró que sus propuestas han sido reflejadas, criticaron la “autocomplacencia” del consejero de Educación, Fernando Rey, al presentar en la Comisión de Hacienda los presupuestos de su departamento para 2018. Así, se refieron sobre todo el dinero consignado para los conciertos privados, al entender que se detraen recursos de la educación pública, al tiempo que lamentaron el alto coste de las tasas universitarias pese a la reducción del cinco por ciento anunciada y que será efectiva en el curso 2018-2019.

En este sentido, el portavoz de la Comisión de Educación en las Cortes por el PSOE, Fernando Pablos, dijo que no coincidía en “casi nada” con Fernando Rey ya que el 3,50 por ciento de subida del presupuesto “es de menos solvencia que el 5,5 por ciento en que se incrementa el presupuesto general de la Comunidad, con lo que hay menos recursos que cuando el señor Rey llegó a la Consejería”. A su juicio, hay que recuperar al menos 200 millones para acercarse al dinero destinado al ámbito educativo en los presupuestos de 2011. “La educación pierde peso respecto a todo lo demás en Castilla y León, hay autocomplacencia con la verdadera realidad y menos dinero para el profesorado público que el concertado, faltando 20 millones en esta campo”, indicó.

Además, De Pablos significó que bajar las tasas universitarias solo un 2,5 por ciento en este curso y el siguiente “es muy pobre” ya que existe una “diferencia abismal” respecto al menor gasto que suponía hace años. “Los datos de la estadística de precios públicos del Ministerio de Educación es clara y el precio medio por crédito en las universitarias en España es de un 18,33 por ciento y aquí cuestan 23,24 euros, los más caros solo por detrás de Cataluña y Madrid. Se paga un 27 por ciento más que el resto de comunidades”, se lamentó, al tiempo apuntó que está bien que se recupere el complemento autonómico de becas Erasmus, pero criticó pero no haya becas para cursar másters.

Por su parte, Lorena González, procuradora del Grupo Podemos, puso de manifiesto que, en su opinión, el presupuesto de la Consejería de Educación “deriva de forma clara en un modelo privado en detrimento de lo público y se trata de un timo al pasar los compromisos incumplidos en 2017 a al dinero consignado en 2018”, criticando que no hubiera partidas, por ejemplo, para el Conservatorio de León. A su vez, la parlamemtaria de la formación política morada anunció que su grupo va a presentar una batería de 223 enmiendas presupuestarias “para lograr revertir 84 millones que se conceden al sector privado en conciertos que deberían invertirse en la educación pública”.

En el lado de Ciudadanos, su procuradora Belén Rosado fue optimista al considerar que los presupuestos educativos de 2018 de la Junta “están teñidos de naranja”, ya que, tal y como señaló, se han incluido el centenar de medidas que propusieron al PP. Así, citó que el plan de renovación y construcción de estructuras en colegios e institutos se hay dotado con 40 millones, la gratuidad de los libros de textos que llegará a 125.000 familias o la reducción de un cinco por ciento a dos años vista en las tasas de estudios universitarios. No obstante precisó que se ha puesto “deberes al consejero” y que habrá que ir viendo “cómo se aplica” y se cumple lo propuesto por Ciudadanos.

“Aumento pírrico”

José Sarrión, procurador de Izquierda Unida, expuso en representación del Grupo Mixto que el prespuesto de la Consejería de Educación para 2018 es conservador “y más de derechas que Don Pelayo” y que el aumento registrado “es pírrico” y no consigue llegar a las necesidades existentes. “La bajada de un cinco por ciento de las tasas universitarias no se ajusta a la realidad, ya que antes de la crisis eran las más bajas del país y ahora las tercera más altas”. Además se mostró en contra de la enseñanza concertada “por que se externaliza un modelo educativo y se apoya a la Iglesia, subiendo el presupuesto”, al tiempo que dijo que no ve indicios de que se pueda ir recuperando el empleo público perdido en educación “y hay que devolverlo y cumplir así con las tasas de reposición desde 2008”.

En el lado del Grupo Popular, la opinión de su portavoz en la Comisión de Educación de las Cortes, José Alonso, fue muy distinta a la de los grupos de oposición, al entender que el presupuesto de 2018 “es cabal y ajustado a los retos de calidad, empleabilidad y educación en equidad”, y reflejó que los buenos resultados de rendimiento académico “son claros y el modelo educativo de Castilla y León sigue siendo el mejor del país y está entre los mejores del mundo”. Por todo ello, acusó a la oposición de “estar lejos de la realidad” y de no ofrecer propuestas y alternativas “que sean creíbles para mejorar a los castellano y leoneses en su conjunto”.