Una Ponferradina herida busca reforzar su orgullo en Vigo
La Ponferradina afronta el partido de mañana ante el Celta herida por los malos resultados que le mantienen en la última posición y por el clima de desencanto que rodea a su afición, que el pasado domingo protagonizó la peor entrada en muchos años en El Toralín.
El equipo berciano está a diez puntos de la zona de salvación y sabe que sus opciones de permanencia son remotas, pero espera al menos recuperar el orgullo después de las últimas decepciones, como la derrota de la pasada semana ante el Rayo Vallecano (0-1), en un partido en el que los de Claudio Barragán pusieron las cosas muy difíciles al colíder de la categoría pero acabaron cayendo en los últimos minutos.
Para este encuentro, Claudio no puede contar con el lateral izquierdo Manuel Redondo, sancionado por acumulación de tarjetas, ni con los lesionados Pepe Alcaide, Iván Pérez y Francis Suárez.
Además, el técnico ha decidido dejar fuera de la convocatoria a los medios centros Víctor Salas y Tam Nsaliwa, al portero Queco Piña y al extremo izquierdo Joseba del Olmo, cuya salida de la lista supone la principal sorpresa de la semana.
Además, el también medio centro Daniel Toribio ha arrastrado molestias a lo largo de la semana, por lo que su estado de cara al partido de mañana ofrece dudas.
En cambio, Claudio recupera al central Iban Cuadrado y al medio centro Jonathan Ruiz, que la pasada semana fueron baja por sanción.
