Baloncesto León continúa su mala racha y cae por 72-60
Baloncesto León se presentaba en Navarra con la plantilla perfecta tras poder disputar minutos Lucho Fernández que superó su golpe en la rodilla. Por su parte el Grupo Iruña debía jugar tan solo con ocho jugadores y sin base suplente. La intimidación de Starosta y sus 2,16 metros de estatura iba a ser un punto importante.
En el primer cuarto Baloncesto León planteó un baloncesto rápido que hizo daño a Navarra, aunque empezara con un acierto muy bajo. En el segundo todo se dio la vuelta y los leoneses se hundieron debido a un porcentaje de acierto muy bajo, lo que llevó a un parcial de 23-11, 37-26. Después del paso por vestuarios Baloncesto León salió como estaba y el Grupo Iruña aprovechó para darle un baño, 53-37. Los últimos 10 minutos sirvieron para maquillar el resultado de la mano de Múgica que consiguieron dejar el resultado en 72-60 para los pamplonicas. Mal partido y derrota clara.
El partido comenzó con ambos equipos muy poco enchufados de cara a canasta, antes de las primeras canastas los locales hicieron un 0 de 5 en tiros de campo y Baloncesto León un 0-3 en el mismo apartado. Los pamplonicas se pusieron con 4-0 en el marcador y los leoneses llegaban a un paupérrimo 0 de 5 en tiros de campo. Starosta flotaba a Mortellaro que no hacía daño, además el gigante checo defendía desde debajo de canasta y ponía las cosas difíciles. Baloncesto León tardo cuatro minutos y medio en anotar la primera canasta pero el marcador no se iba en exceso (9-6). Poco a poco los pamplonicas se fueron en el marcador 14-8, pero Quezada estaba en estado de gracia y junto con Durley llevaban el peso anotador del equipo de De Grado, 14-11. León quería correr porque el Grupo Iruña jugaba solo con ocho jugadores y no tenía suplente en el puesto de base. Al final del cuarto Baloncesto León se marchaba por delante 14-15, acabando Quezada con siete puntos y Durley con 4. Mientras que por el Grupo Iruña Pamplona Savitski y Rakocevic son seis puntos.
El segundo cuarto comenzaba con Langford enchufado y haciendo daño a Baloncesto León, por lo que el marcador volvía a ser local, 24-17, tras un triple de Jorge García Navea, exjugador de León. El tiempo muerto obligado de De Grado no surtía efecto y Pamplona acribillaba a León con tres triples seguidos en una acción ofensiva que repetían los locales hasta la saciedad y el míster pretendió corregir pero sus jugadores no aplicaron, 27-17. Baloncesto León tenía muchos problemas de acierto fallando tiros fáciles y cómodos, como los de Múgica y Mortellaro. Los locales pasaban por encima con poquitas cosas en ataque y muy poca eficacia visitante, por lo que llegaron a la máxima renta de 15 puntos, 37-22 (23-7 el parcial del cuarto), con el triple de Víctor Pérez, lo que obligó al tiempo muerto de De Grado. Tras el parón Quezada anotó cuatro puntos consecutivos y redujo la diferencia a 11, Jareño, entrenador local, pedía tiempo muerto. Ni una sola canasta más en todo el cuarto dejó el marcador al descanso en 37-26.
El problema de León era el base local Mikel Uriz que manejaba el tempo de ataque a su placer y la defensa de Juanjo Bernabé no estuvo, ni por asomo, al nivel habitual, además cuando el americano Langford estaba en pista hacía mucho daño pues condicionaba la defensa leonesa. El dato más relevante de las estadísticas al descanso era el porcentaje de acierto desde el triple, Baloncesto León marcaba un 10% (uno de 10), mientras que el Grupo Iruña llegaba al 46,67%, con un siete de 15.
Tras el descanso
El tercer cuarto comenzó con una nueva defensa de Baloncesto León que hacía daño a Iruña, De Grado aplicó una Caja y 1, además de dejar descaradamente tirar a Savitski, que no tardó en sentar Jareño. Fue un espejismo, Baloncesto León comenzó un descenso cuesta abajo y sin frenos, los locales se fueron hasta el 47-29 y los de De Grado no tenían argumentos ante los locales que tenían muchísimo más acierto de cara a canasta, además de no saber a que jugar. Baloncesto León llegaba hasta el uno de 16 en triples, tras los fallos en el cuarto de Quezada, Bernabé y Lucho Fernández, los navarros se iban de 20, 49-29. Tras el tiempo muerto de De Grado llegó el triple de Múgica, además de un tapón en defensa y otra canasta dejó el 49-34. El cuarto terminó con un preocupante, aunque no demasiado lejano, 53-37. Muy mal cuarto con una mala selección de tiro y poca defensa, salvo Múgica que ponía carácter sobre el parquet, nadie se salvaba.
En el cuarto decisivo Baloncesto León espabiló algo y de la mano de un muy buen Múgica consiguió poner a 14 puntos, 59-45 a falta de cinco minutos y 25 segundos por jugar. El interior leonés llegaba ya a los 9 puntos y un robo suyo y asistencia posterior a Rocchia dejaba a León con posibilidades. Juanjo Bernabé, frustrado por su mal partido, se iba del partido tras hacer su quinta falta y Múgica seguía a lo suyo con un triple que dejaba el 61-48, llegando a los 12 puntos, todos en la segunda parte. En tiempo muerto De Grado aseguraba a sus jugadores que se podía remontar y pedía a sus jugadores llevar a Starosta a la línea de tiros libres. Pero el partido estaba resuelto pese al triple de Calvo que colocaba la diferencia a 11 con dos minutos 43 segundos por jugar, ya que Savitski anotaba otro triple, flotado por Múgica, y Langford anotaba dos tiros libres, el marcador llegaba a 69-55. En el último minuto Savitski amplió la ventaja con un triple y Quezada con dos tiros libres y Rocchia con un triple maquillaron el resultado hasta el 72-60 final.
Dos muy malos cuartos de Baloncesto León le condenan a cosechar una nueva derrota. La operación maquillaje del último cuarto dejó la diferencia en solo 12 puntos después de haber estado a 20 puntos en el marcador. El único que se libró de la quema fue el leonés Múgica que llegó a los 12 puntos e imprimió mucho carácter al equipo leonés. La defensa ha sido muy floja y el ataque estuvo marcado por la mala selección de tiro. Toca cambiar de actitud en el próximo partido el martes 20 de diciembre contra el Breogán de Lugo a las 20.45 horas.
