Volando voy, volando… no vuelve nada a León

Vuelo en globo de la cápsula espacial de Zero2Infinity en 2013 desde el aeropuerto de La Virgen.

Máximo Soto Calvo

La ciberseguridad se nos fue a golpe de megabyte, la política y el lobby pertinente pusieron las alas. Fracasó la candidatura de Legio, realizada por muchos, según los medios, sin staff o cabeza conocida, para optar en Bruselas a capital de la Ciberseguridad europea. Y muy poco que añadir salvo que gozaba de extraño acompañamiento, hasta la Junta dijo que estaba interviniendo para alcanzar tal cosa. ¡Lagarto, lagarto! Poca voluntad o maleficio imperante, suponía muy corte bagaje, incluso para mediano resultado. Ni el Incibe ni la ULE implicados salieron bien parados.

En connotación con todo esto. Euskadi alcanzó un premio de consolación que más adelante citaré. Ante éste la Junta, herida en su amor propio, no por la pérdida y daño que se infería a León al excluirlo, incluso, de tal pedrea, sino como potencia regional, (que se cree, y gusta de intitularse en singular con derroche de perversión de la realidad birregional), notoriamente comprobable al soltar: Lo de Euskadi es una “iniciativa interesante”. Refiriéndose a lo que iban a poner en marcha acompañados por la inyección de 1.000 millones; un fondo en Ciberseguridad, en un supuesto quinquenio ya iniciado.

Euskadi les pisaba el terreno, y eso dolía a los jerifaltes del ente, por competitividad y empuje, pero lo cierto es que a la Junta siendo la operación a defender para León en verdad les hacía perder interés, por decirlo de manera suave.

Encajado en el tema de los vuelos (¡¡¡Tan altos, como una Agencia Aeroespacial!!!) surge este escrito a modo de reflexión y queja. Hemos estado y seguimos en ello, aunque con pérdida de puntuación y empuje, en la cuestión Aeroespacial para España, que carecía de ella, y llegado es el momento de acoger una bien montada Agencia. Para su ubicación, a la que al parecer han optado algunas Comunidades autonómicas, aparecía Castilla y León, dicen que con el ojo puesto en León, casi seguro que de soslayo, opino.

El presidente Sánchez ha dicho que España va a tener su NASA, y habla de descentralización. Todos sabemos lo que esto puede significar. Y el plazo de arranque está cerca, se cita el 2023. El ente al que conocemos perfectamente, y por miles conjuras seguimos tolerando, sabe jugar bien sus bazas cuando el premio es para la parte castellana, incluso arrebatándonos lo que está a medias en plan leonés; también con menor empuje cuando va sobre territorio que consideran castellanizado, cosa ésta que con León no cuaja.

No faltan quienes nos observan, tal vez con intencionalidad no bien definida, puede que ni limpia, para ver cuáles van a ser los movimiento que en León surjan socialmente, como empuje de masas. Si bien en este segmento, en plan colectivo, de momento ni se es consciente ni parecen hervir inquietudes. Faltan agitadores y líderes, más allá de lo cultural.

El regidor legionense, se va a quedar, políticamente, muy solo en la demanda. De la ULE, bien interesada sin duda, no conozco su modo de presionar.

Leoneses 'aeroespaciales'

Mas, no puedo menos que recordar aquí, aunque sean en clave cuasi anecdótica, pero que nos significan, a aquellos jóvenes valores leoneses que han entrado en contacto con la Nasa tal como Manuel Fernández con un trabajo fotográfico realizado desde el conocido como Observatorio Astronómico Infrared, sobre una nebulosa a 3.000 años luz de la tierra, cuyos datos no son necesario reproducir, trabajo nada fácil, que la Nasa le compró allá por 2011.

Próximo en el tiempo al anterior, en 2014, encontramos a Miguel Valbuena, biotecnólogo formado en la ULE, que ha cultivado semillas de una planta que puede aportar agua reciclada, oxigeno, e incluso ser comestible, que serán ensayadas por la NASA en el espacio, en viaje hacia la Estación Espacial Internacional. Ya cuentan con él.

En la Universidad de León se imparte Grado en Ingeniería Aeroespacial, y hasta donde he podido saber siempre ha habido una buena relación con la base Aérea de la Virgen del Camino, aquella para la que Aznar, prometió una Escuela de Pilotos, que “nunca aterrizó”. La Junta manifiesta haber mandado por carta al Gobierno, la conveniencia de que se asiente en León. ¿Dudas en nosotros? ¡Todas!

¿Además de una misiva, qué más ha hecho para apoyar la idea, o recabar atención por el Gobierno central? Tal vez manifestar que León tiene clara especifidad para acogida de la la Agencia, pero si acaso añaden que también Valladolid, Burgos, Palencia Soria y más lejos Salamanca, estarán como apoyo o expectante, por si es caso diferirlo, añado yo.

Teruel, goza de aeropuerto para aparcamiento de aviones en plan de eficaz desguace, tiene posibilidades de llevarse una faceta de lo aeroespacial. “Teruel Existe” con voz y voto en el parlamento nacional parece que ambas cosas las usa para presionar y hacer trueques. León, no tiene voz en el parlamento.

¡Leoneses! No es momento de dejar pasar oportunidades, los parlamentarios que se dicen de León, o están castellanizados o son junteros por conveniencia partidista y asentamiento personal. ¡¡No hay apoyo!!

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