El primer tramo de muralla transitable se estrena estas fiestas
El proyecto de convertir la muralla en un lugar transitable se ha hecho realidad. Las obras de este elemento patrimonial que circunda el Parque del Cid, en el corazón de la capital leonesa, finalizarán esta semana. Los operarios de la empresa responsable de la reforma trabajan estos días sin descanso. Según les han informado, con el inicio de las fiestas de León este viernes, el acceso al adarve transitable estará abierto y la calle peatonal, donde se encuentra la maquinaria y el material de obra, debe quedar totalmente limpia antes de la inminente colocación de las habituales casetas de artesanías de las fiestas de San Juan y San Pedro.
Una escalera de madera sostenida en una estructura metálica llevará a los viandantes hasta la parte alta de la muralla, pudiendo contemplar sus vistas a lo largo de sus 90 metros de longitud, a una altura de seis metros. Con esta obra, la muralla del parque del Cid será, junto a las de Lugo y Ávila, la tercera muralla transitable de España.
En este proyecto también se ha marcado el suelo con un empedrado que recuerda el trayecto original que recorría la muralla en la época romana, hoy, desde el parque San Francisco hasta el parque del Cid. Además ha sido marcado el famoso 'cubo perdido', encontrado gracias a un georradar y del cual se desconocía su ubicación hasta ahora. Las obras de restauración han sido realizadas por la empresa Esoca S.L. que también fue la encargada de recuperar 440 metros cuadrados de las vidrieras de la catedral.
En sus orígenes la muralla estaba formada cada 15 metros por un cubo de refuerzo y seguridad, y en algunos tramos, como este del parque del Cid se pueden observar las distintas refomas que ha sufrido.
El bloque inicial del siglo I cuenta con un grosor de 1,86 metros, posteriormente en el siglo III , fue reforzado con otra capa de piedra de 4,7 metros de grosor y ahora en el siglo XXI algunas zonas han tenido que ser aseguradas de nuevo, pero siempre respetando las anteriores, visibles especialmente en el corte transversal de la muralla frente a la Diputación. En una de las caras de la muralla, la que da al Instituto Juan del Enzina, se puede apreciar el deterioro que sufría la muralla antes de esta restauración.
Desde los seis metros de altura que ofrece este muro defensivo, los leoneses podrán experimentar otra perspectiva de edificos como el Palacio de Botines, la Diputación, el Instituto Juan del Enzina y, cómo no, el parque del Cid. El acesso al adarve de la muralla permanecerá abierto de forma permanente, excepto por la noche, cuando el parque cierra sus puertas.
