Más puestos y más visitantes en el Rastro

Desde primera hora de la mañana de este domingo, los vendedores del Rastro leonés han dejado ver su alegría por recuperar una de las ubicaciones que consideran “históricas”: el Paseo de Papalaguinda.

“Este es el mejor ocio dominical que tiene León, ya era hora de que alguien se diera cuenta”, indican a ileon.com dos puesteros ubicados en la zona intermedia del Rastro.

Los comerciantes también destacan que de momento la afluencia de público está siendo “positiva” y también que hay muchos puestos que han vuelto a León a partir de este domingo, ya que habían dejado de asistir a la explanada de Clarés porque no les resultaba rentable.

“Ese lugar tenía mala fama. No le gustaba ni a comerciantes ni a compradores. Aquí las cosas serán distintas”, explica otro de los puesteros ante la pregunta de los periodistas.

¿Todos contentos?

Por el lado de los vendedores, la respuesta fue unánime: todos están conformes con haber recuperado la ubicación de Papalaguinda. Y por el lado de los compradores, también. “Esto es un Rastro como la gente, si el de León siempre fue uno de los mejores de España”, valora Antonio.

Unos metros más allá, dos amigos comentan: “yo antes venía todos los domingos, pero desde que lo llevaron al estadio (por el predio de Clarés) dejé de ir. Ahora vuelve a ser un paseo”.

Y los hosteleros de la zona se suman a las conclusiones positivas, aunque con cautela: “Nosotros esperamos recuperar las ventas que teníamos antes del traslado. Habrá que ver qué pasa a partir de ahora, pero nos parece bien”.

De momento, las principales críticas se han escuchado desde el Partido Socialista, que ayer emitió un comunicado afirmando que “volverá el descontrol de la venta ambulante” y desde las asociaciones de comercio tradicional de León, que estiman que sus ya mermadas ventas se verán perjudicadas por la proximidad del Rastro.

“Yo quisiera que uno de esos comerciantes se siente conmigo aquí toda la mañana y vea cómo son las ventas reales que tenemos. Parece que nos hiciéramos ricos y no es así. La crisis nos ha afectado mucho a todos, la gente mira mucho antes de gastar”, concluye María, vendedora de ropa interior y calcetines.