Princal critica que el Gobierno quiera “regatear” partidas para desarrollo rural
La Federación para la Promoción Rural Integral de Castilla y León (Princal) no comprende que la Administración central “regatee” en el diseño de la financiación de los programas de desarrollo rural, cuyos fondos proceden tanto del Feader como del Estado y de la Comunidad autónoma, “habida cuenta de que España ya ha pasado lo peor de la crisis”. De este modo, desde la organización inciden en que “sería de justicia que el Estado aportara el 50 por ciento de la cofinanciación, en lugar del 30 por ciento”.
Princal también confía en que la Comunidad autónoma cuente con los actuales 44 grupos de acción local en el presente periodo de programación, que finaliza en el año 2020. Fuentes de Princal recuerdan, en una valoración recogida por Ical, que el diseño de la política de desarrollo rural para Castilla y León, así como su financiación, “no ha concluido todavía”, y el nuevo modelo debe suponer que “cada uno de los colectivos pueda gestionar al menos cuatro millones de euros de fondos públicos”, lo que le permitirá “trabajar con intensidad en favor de los emprendedores rurales y del conjunto de las poblaciones”.
Aunque en el periodo de programación que acaba de finalizar el dinero público gestionado por los grupos sólo procedía del Feader, desde la Unión Europea se ha abierto la puerta a que los grupos también puedan promover actuaciones a partir del Fondo Social Europeo (FSE) y el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (Feder). Desde Princal defendieron que los grupos “poseen entidad suficiente, además de una forma de trabajo transparente como para gestionar esos fondos”. “Así lo demostraron cuando el reglamento permitía ese trabajo, como sucedía en otros periodos anteriores dentro del Leader y del Proder”, aseveraron.
Más de 20 años de trabajo
Las mismas fuentes insistieron en que sus reclamaciones se refieren a los 44 grupos de acción local de Castilla y León, cuya pervivencia “resulta deseable habida cuenta de que llevan trabajando más de veinte años en sus respectivas comarcas, a las que han dado coherencia económica y social, y cuyos habitantes han desarrollado cierta sensación de permanencia”. “Diseñar de nuevo los ámbitos de actuación de nuevos grupos supondría deshacer lo andado a lo largo de dos décadas”, advirtieron.
Así, los responsables de Princal entienden que el conocimiento de los grupos respecto a sus respectivos territorios “hace de ellos unos interlocutores y colaboradores de primer orden”. En ese sentido, también dan la bienvenida al proyecto de ADE Rural, ya que “toda iniciativa que plantee el desarrollo de la economía rural es positiva”.
En este sentido, la Federación defiende que hay un modelo que dejó “buen sabor de boca”, que era el de los agentes de extensión agraria que recorrían los pueblos buscando mejorar el sistema productivo, animando a agricultores y ganaderos. Así, constatan que “hoy sólo los grupos pueden reeditar aquel modelo, desarrollado por personas que creían en lo que hacían y no regateaban esfuerzos”. Por último, inciden en que “este espíritu es lo que avala el trabajo de los grupos, reforzando la metodología Leader, apoyando y sacando el máximo fruto a todas las oportunidades posibles en los territorios; y ADE Rural es una nueva oportunidad en la misma dirección”.
