Preocupación con el tren Avril entre León y Asturias: un vídeo que muestra grandes vaivenes alarma a los pasajeros

Al principio eran todo risas por cómo se movía el tren, bamboleándose fuertemente desde que pasó por el intercambiador de ancho de León a Oviedo; pero según fue pasando el tiempo y al tener que pasar 101 kilómetros así, las risas fueron convirtiéndose en nervios al llegar a preocuparse por la seguridad.

Esto es lo que vivieron el viernes 14 de junio los pasajeros del tren Avril S106, la nueva y flamante unidad ferroviaria que tanto querían los políticos asturianos para la Línea de Alta Velocidad de la Variante de Pajares abierta a finales de noviembre, y que derivó en un incomodísimo y preocupante viaje que denunció uno de ellos con un vídeo que está corriendo como la pólvora en las redes sociales.

“Desde el cambiador de León hasta Oviedo, hemos ido botando. Espero también que por seguridad, sea revisado. Vengo todas las semanas y nunca vi algo así”, explicaba Alex Sánchez en un hilo de tuix que han ido recogiendo cuentas especializadas en el sector ferroviario que claramente han mostrado su inquietud por la mala imagen que está dando el Avril, una unidad que muestra numerosos problemas en sus menos de dos meses de circulación desde el 25 de abril.

Se da la casualidad de que el viajero que subió ese alarmante vídeo efectúa trabajos para Adif en una empresa externa a la compañía. Así que él mismo descarta la posibilidad de que el problema provenga del diseño de la Variante de Pajares. La Administración de Infraestructuras Ferroviarias se encarga de las obras de los raíles, los túneles y los trabajos de señalización y electrificación, mientras que Renfe es la operadora que se encarga de gestionar el tráfico ferroviario de los trenes. “Sí el problema fueran las vías ocurriría en todos los trenes. Creo que el problema es del tren ya que de lo contrario ocurriría en más trenes. Aún sabiéndolo, el servicio que contrato yo es de Renfe y mi reclamación debe ir a ellos”, afirma en la Red Social X.

La propia Renfe, a la que ILEÓN ha pedido explicaciones de lo ocurrido, pidió disculpas y aseguró, en una respuesta al usuario que había “inmovilizado el tren para analizar la causa de esta anomalía y trasladar la incidencia al fabricante”.

Renfe: “La unidad se revisó y está de nuevo en circulación”

La respuesta de la operadora ferroviaria ante este problema detectado el 14 de junio ha sido que “ese tren se inmovilizó para poder analizar la causa de la anomalía y poder trasladar la incidencia al fabricante”, para añadir que “una vez revisado por los técnicos ‘in situ’, el tren ya está de nuevo en circulación”. Sin embargo, no ha especificado cuál fue el fallo que causó el problema.

El servicio que presta Renfe tras el estreno del servicio AVE en Asturias el pasado 21 de mayo se efectúa con dos frecuencias diarias de AVE S106, una en la relación Gijón-Madrid (una en cada sentido) y la otra como AVE pasante Gijón-Castellón (uno en cada sentido), según los datos de la compañía estatal de transporte ferroviario.

“En total, la oferta comercial de Alta Velocidad entre Asturias y Madrid desde el 21 de mayo asciende a 21.500 plazas semanales, lo que supone un incremento del 33,5% con respecto a la oferta anterior al estreno del servicio AVE S106”, aseguran.

Dos meses de problemas constantes con el nuevo Avril

La llegada a Oviedo del Avril S106 con graves problemas de suspensión se retrasó un 40% con respecto al tiempo original de viaje, unos 63 minutos, ya que llegó con 25 de retraso. Según comenta el viajero, 20 de ellos desde León. “Desde el cambiador en León, hasta Oviedo fue más o menos así todo el camino. Es más, según pasamos el cambio de ancho, empezó a botar exageradamente durante un minuto, a pesar de ir a veinte kilómetros por hora”, precisó.

La línea de Alta Velocidad entre León y Asturias es la más 'lenta' de España, con una media de velocidad que sobrepasa por poco los cien kilómetros por hora en un trayecto de 101 kilómetros entre la capital leonesa y la del Principado (Oviedo) y los 133 a Gijón. En el momento de grabarse el vídeo, el convoy circulaba en un rango de velocidades entre 80 y 170 kilómetros por hora. Pese a que el Avril puede llegar a 300 kilómetros por hora, por las características técnicas de la Variante de Pajares no supera los 200 kilómetros por hora, la misma velocidad a la que operan los Alvia, por ese trayecto. Es decir, de León a Asturias va a la misma velocidad que los Alvia.

Y todo tras casi veinte años de obras –con problemas medioambientales gravísimos afectando a los acuíferos de la Montaña Central leonesa de tal modo que un río Bernesga al día se ha desviado a la vertiente asturiana, dejando en verano en una inédita sequía en la zona– pese a que estaba planificado finalizarlas en tan sólo cinco; y que pasaron de un presupuesto inicial de 1.500 millones de euros a más de 4.200.

La Variante de Pajares abrió el pasado 30 de noviembre al tráfico de viajeros y en su primer mes superó los 75.000 billetes vendidos en una línea ferrea que no usaba casi nadie, al suponer más de una hora de ahorro de tiempo a Oviedo o a Gijón con respecto a la decimonónica rampa de Pajares. Así, el trayecto a Madrid desde Oviedo pasó desde ese día de las cuatro horas y media a las tres horas y veinte minutos y de Gijón a Madrid de más o menos cinco horas a las tres horas y cuarenta y cinco minutos.

CUESTIONES TÉCNICAS

Un trayecto “que debía haberse detenido por seguridad”

Expertos consultados por ILEÓN mostraron su más absoluta preocupación al ver los vídeos subidos por el usuario que denunció la situación. Todos coinciden en que ese convoy “debía haber sido detenido por seguridad, no se puede viajar así. Más allá de la extrema incomodidad de los viajeros, el tren muestra una preocupante tendencia hacia una resonancia en la suspensión que se podría haber agravado con un descarrilamiento que, a esas velocidades, habría provocado una catástrofe como la de Angrois el 23 de julio de 2013”, con ochenta muertos.

Precisamente aquel terrible accidente en Galicia, el mayor de la historia de la Alta Velocidad ferroviaria de España, causó la creación de la AESF (la Agencia Española de Seguridad Ferroviaria), que, ante estas imágenes tan preocupantes en un tren de nueva incorporación a las operaciones ferroviarias con pasajeros, es posible que se vea obligada a que una investigación para determinar si estas nuevas unidades son realmente seguras para este tipo de servicios.

“El propio maquinista, o el jefe del tren o el interventor deberían haber parado el trayecto”, apuntan los técnicos consultados. “No es de recibo que se circule con esas condiciones tan peligrosas, incluso hasta habría sido adecuado que algún viajero hubiera activado la seta de emergencia. Se podría haber producido una catástrofe”, remachan.

Al parecer el problema se da en los Avril S106 de eje variable, ya que se les ha dotado de una nueva suspensión primaria “que hace hasta buena a las de uno de los trenes que dan el servicio Alvia, el S130, que es conocida por ser un tanto movida a altas velocidades”. “La suspensión primaria previa era totalmente distinta, con esta se acentúan más los baches y oscilaciones en la vía; y los primeros días de esos S106 de rodadura desplazable, que permite transitar tanto por vías de alta velocidad o convencionales de ancho ibérico, están demostrando que es mucho peor. En el S130 no se nota tanto; aunque cuando empezaron a operar tambien tuvieron problemillas; pero el Avril lleva mucho tiempo probándose y así estamos”, especifican.

No hay problema en los S106 de ancho fijo internacional

Este problema no se da en las unidades de ancho fijo internacional, que sí conservan la excelente suspensión que hizo famosa a la compañía Talgo. Las unidades destinadas a la línea Madrid-Zaragoza-Barcelona, por ejemplo.

“La constructora ha intentado innovar con la suspensión de los trenes Avril que pueden circular por la vía estándar y el ancho español, y no le ha salido bien; tendrá que mejorarla y eso podría suponer su retirada temporal de la circulación, dependiendo de lo que considere la AESF. Lo cual supondría una crisis reputacional no sólo para la compañía sino para toda la marca de la Alta Velocidad Española en el mercado internacional”, manifiestan los expertos consultados por ILEÓN.