PP y Ciudadanos sellan el nuevo presupuesto de 145 millones para León con cuatro meses de retraso
El Pleno del Ayuntamiento de León aprobó esta mañana inicialmente, y sin sorpresas, con los apoyos de los concejales del PP y de Ciudadanos -UPL, PSOE, León Despierta y León en Común votaron en contra-, el presupuesto para este año, que asciende a 145 millones. Un presupuesto que suma casi cuatro meses de retraso conforme a la Ley y en concreto demorado el último un mes y medio por condicionantes impuestos por el Ministerio de de Hacienda, y que no fueron remitidas con anterioridad por el Consistorio.
Después de que la Secretaría General de Financiación Autonómica y Local emitiera el correspondiente informe favorable, el portavoz del equipo de gobierno del PP, Fernando Salguero, defendió hoy unos presupuestos que el alcalde Antonio Silván y la portavoz de Ciudadanos, Gemma Villarroel, presentaron públicamente el 10 de enero, fruto del consenso entre ambas formaciones. La previsión inicial de aprobarlos el 31 de enero se torció cuando Ciudadanos anunció que no los apoyaría hasta recibir el dictamen previo y vinculante del Ministerio de Hacienda, necesario como consecuencia del Plan de Ajuste de 2012.
El portavoz Salguero remarcó hoy que las cuentas para 2018 son “realistas, facilitan y generan estabilidad y certidumbre y se basan en pilares como el refuerzo de las políticas sociales, el fortalecimiento de las políticas de empleo y la disminución de la deuda municipal.
A este respecto, el concejal de Hacienda, Agustín Rajoy, recalcó que cuando el actual equipo de gobierno llegó al Ayuntamiento, la deuda ascendía a 229 millones -en 2010 era de 434, cifró, a pesar de negarlo el PSOE- y se espera cerrar este ejercicio con una deuda de 180 millones de euros.
El presupuesto crece un 2,16% (dos millones) respecto a 2017 e incrementa en un 26% las partidas destinadas a promoción económica y un nueve por ciento las de familia y servicios sociales, quiso cifrar el equipo de Gobierno que preside Silván. La inversión global, incluidas las partidas provenientes de otras administraciones y las ayudas europeas de la Estrategia de Desarrollo Urbano Sostenible (Edusi), que para este ejercicio alcanzan los 5,8 millones -de las que el Ayuntamiento aporta el 50 por ciento-, asciende a 18,36 millones, lo que supone un 25% más que el pasado año.
Las 48 propuestas-peaje de Ciudadanos
Villarroel recordó hoy que el apoyo de Ciudadanos al PP “no le sale gratis” y que lo tiene a cambio de incluir 48 propuestas que suman 4,5 millones y que suponen, según la edil la mitad de la inversión real que asumen las arcas leonesas, a pesar de que ésta alcanza los 18 millones. Además de responsabilizar a PP y PSOE del retraso en la presentación de los presupuestos, reprochó al edil leonesista, Eduardo López Sendino, no haber presentado ni una sola enmienda.
El portavoz socialista, José Antonio Diez, lamentó que las cuentas, a las que su grupo planteó 39 enmiendas, no sean “inversoras, ni supongan más servicios, ni proyectos de futuro para la ciudad” y recalcó que el Ministerio de Hacienda planteó condicionamientos “importantes” sobre su ejecución. También lamentó que los 550 millones que el PP habrá gestionado en el Ayuntamiento de León cuando concluya el mandato “no sirvan para nada ni mejoren la calidad de vida de los ciudadanos”.
El portavoz de León Despierta (Podemos), Óscar Fuentes, acusó de “ocultación de información e incapacidad de previsión” al equipo de gobierno además de señalar que los presupuestos “como los derechos fundamentales acaban siendo meras declaraciones de intenciones”.
Las concejalas de León en Común, Concha Lucas y Victoria Rodríguez, afirmaron que el PP “regala dinero a los bancos” y atribuyeron al equipo de gobierno de Silván “una gestión de principiantes”, además de solicitar una auditoría de la deuda municipal.
Sendino, por su parte, reprochó a Ciudadanos que sus propuestas para León sean un 'corta-pega' de las que hace la formación en el resto de España y advirtió a los ediles del PP “de lo que suele pasar cuando alguien se junta con una mantis. Hay amores que matan”, concluyó.
De hecho, fue la 'trifulca' partidista entre los grupos de oposición con Ciudadanos la que acabó desviando la atención el debate plenario, dejando por momentos de lado el asunto del presupuesto para dentrarse en el desgaste mutuo de cara a las próximas elecciones, un cuerpo a cuerpo dialéctico en el que la portavoz naranja Villarroel se desenvolvió con cierta soltura.
El PP se limitó a observar ese enfrentamiento sin apenas contraargumentar nada a las críticas recibidas y dejar que se sellara, por fin, un nuevo acuerdo económico que normaliza todo este ejercicio, quizá conscientes de que puede no haber mayoría para el presupuesto de 2019 a causa de la distorsión electoral.
