El Plan de Garantía Juvenil se para llegar a más jóvenes y facilitarles la integración laboral

R. Travesí/Ical

El programa que promueve la Unión Europea para favorecer la inserción laboral de los jóvenes menores de 25 años, más conocido como Plan de Garantía Juvenil, ya cuenta con 3.337 inscritos en la Comunidad. Pese a ser más del doble de la cifra registrada hace tres meses, la Junta de Castilla y León, a través de la Consejería de Familia e Igualdad de Oportunidades, ha decidido reforzar los cauces de información y de asesoramiento para llegar al mayor número posible de beneficiarios. No en vano, la Comunidad cuenta con 23.700 personas entre 16 y 25 años que ni trabajan ni estudian.

El Plan de Garantía Juvenil cuenta en 2015 con una partida de 14,5 millones de euros en Castilla y León entre fondos europeos y de la Junta, con presupuestos en las consejerías de Economía, Educación y Familia. El objetivo último es ofrecer a los jóvenes, en un plazo de cuatro a seis meses, una alternativa de empleo, educación o formación tras haber finalizado sus estudios o quedar desempleados.

De cara a aumentar ese registro, la Consejería ha puesto en marcha un Sistema de Información y Orientación de la Garantía Juvenil para que ningún joven pierda, por falta de información u orientación, la oportunidad de acceder a la formación y empleo del programa. A primeros de febrero de 2015 comenzó a dar información a los jóvenes de la Comunidad, de entre 16 y 25 años, en riesgo de exclusión social o con discapacidad, sobre las nuevas posibilidades de inserción laboral que supone la iniciativa europea Garantía Juvenil.

Reciben información pero también se les facilita su inscripción en el registro creado de ámbito nacional. Y es que la inscripción en este fichero es un requisito imprescindible para que los jóvenes de esas edades, que ni estudian ni trabajan, puedan acogerse a este programa.

Desde la puesta en marcha de este sistema de información y asesoramiento de la Garantía Juvenil, la Junta ha realizado más de 5.700 acciones de información entre envío de cartas (con la documentación acreditativa de la situación de exclusión social o de discapacidad y el formulario de solicitud), llamadas telefónicas y atenciones de forma presencial.

Los beneficiaros son jóvenes de 16 a 25 años pero esa horquilla aumenta hasta los 30 años en el caso de personas con un grado de discapacidad igual o superior al 33 por ciento. En todos los casos, es necesario que no hayan trabajado en los 30 días naturales anteriores a la fecha de solicitud, ni haya recibido acciones educativas en el último mes.

Además, la Junta de Castilla y León ha abierto cauces de comunicación para acercarse “de forma proactiva” a la juventud y lograr que los jóvenes con discapacidad y los beneficiarios de la Renta Garantizada de Ciudadana en la Comunidad o de programas de apoyo a la familia puedan participar en esta iniciativa.

Cauces como el teléfono de información 012, las unidades de Juventud y las delegaciones territoriales de la Junta, las entidades del tercer sector y el Consejo de la Juventud de Castilla y León. Precisamente, con el ánimo de contar con un “cauce directo de difusión”, la Consejería de Familia concedió una subvención de 138.200 euros a este órgano para reforzar las acciones de difusión e información entre los jóvenes.

Una aportación que ha posibilitado la contratación de nueve jóvenes –uno por cada una de las provincias– que son los encargados de prestar esa información y asesoramiento. “Se trata de que sean los jóvenes quienes lleven el mensaje a los jóvenes para lograr la mayor implantación del programa”, explican fuentes de Familia.

Consejo de la Juventud

Precisamente, el presidente del Consejo de la Juventud, Roberto López, reconoce a la Agencia Ical que el número de inscritos en el Programa de Garantía Juvenil es escaso, tanto en Castilla y León como en España, teniendo en cuenta el colectivo tan amplio y los beneficiarios potenciales. La cifra en España, a finales de junio, era de 67.000 en el conjunto del país, por lo que la Comunidad aportaba el 5 por ciento del total. “No debe haber excusas porque es inaceptable que nuestro país tenga un desempleo juvenil del 52 por ciento”, sentencia.

A su juicio, el programa europeo es “muy ambicioso” y están implicados numerosos agentes, por lo que aún es necesario aunar a todos. “De momento, no hay un plan definitivo y falta una verdadera campaña a nivel nacional para darlo a conocer entre los jóvenes”, precisa. Y eso que considera que Castilla y León lleva ventaja a otras comunidades donde no se ofrece el programa ni está implicado el Consejo de la Juventud ni las asociaciones y felicita el trabajo de Familia. Pero también critica la excesiva burocratización.

La solicitud de inscripción en ese fichero se podrá presentar en cualquier oficina de registro de la Comunidad o de la Administración General del Estado o bien por vía telemática, en la propia web del Ministerio de Empleo y Seguridad Social (www.empleo.gob.es/es/garantiajuvenil/accesoJovenes.htlm), aunque es un trámite que puede durar un mes entre solicitar el usuario y contraseña, rellenar los datos e incluir el currículum.

López explica que las diferentes oficinas del Consejo de la Juventud han inscrito desde el mes de enero a 1.100 jóvenes, un número que espera que aumente a medida que surjan nuevas acciones. Cita, por ejemplo, la previsión de Renault de contratar a 400 jóvenes en las factorías de Valladolid y Palencia que deberán tener como requisito previo estar inscrito en el Plan de Garantía Juvenil pero también los seleccionados por el propio consejo para informar sobre el programa. “Es importante que los jóvenes hablen con otros que comparten problemas”, apunta.

La Consejería de Familia acordó subvencionar a entidades para que realicen programas específicos de itinerarios personalizados de apoyo al empleo para jóvenes con discapacidad pero también implicar a Cruz Roja y la Federación de Centros Juveniles Don Bosco para formar a jóvenes de Castilla y León en situación más vulnerable, que cobran la Renta Garantizada de Ciudadanía, para dotarles de las herramientas necesarias para dar el salto al mercado laboral.

En su opinión, el Programa de Garantía Juvenil no va a acabar con el desempleo juvenil pero asegura que generará oportunidades. Aunque, precisa que hay jóvenes que después de cuatro meses inscritos aún no han recibido una oferta de formación ni un empleo, tal y como contemplan el plan. De momento, se felicita porque fruto del Diálogo Social, se haya decidido ampliar la edad de los beneficiarios hasta los 30 años, que estará listo en unas semanas.

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