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25 personas se unieron al Día de la Resistencia de la Esquierda Llionesa contra Castilla

Apenas 25 personas, la mayor parte de ellos jóvenes pertenecientes o simpatizantes con alguna de las organizaciones convocantes de la llamada Esquierda Llionesa -Mocedá en Pie, Agora País Llionés, Ruchar y Xuntanza-, se unieron esta mañana en la Plaza del Grano de León al Día de Resistencia, como respuesta al Día de la Comunidad Autonóma de Castilla y León.
El lugar elegido por los manifestantes, que acudieron con ánimo festivo y revindicativo al grito de eslóganes como “Leoneses somos, fuimos y seremos / por castellanos nunca pasaremos”, fue la emblemática Plaza del Grano de León, donde corearon algunas frases, leyeron un manifiesto feminista.
Posteriormente, un asistente ajeno a los colectivos convocantes, según han explicado, quemó una bandera de Castilla y León en señal de rechazo. Algo de lo que se desvincularon y repudiaron en sus redes sociales.
Uno de los asistentes.
Posteriormente, los asistentes protagonizaron un llamativo pasacalles por el Casco Antiguo de León tratando de hacer “partícipe a la ciudadanía de su reivindicación”, como explicaban en su convocatoria.
Tras la concentración, la reivindicación y la fiesta se dieron la mano con la celebración de la denominada Fiesta de Resistencia, que en esta segunda edición tendría por escenario la Taberna El Cuervo (C/ Sal 6, León), con una Jam Session de música folk “donde cualquier asistente podrá intervenir con música, baile o lecturas poéticas reivindicativas”. A continuación, concierto del grupo de música El Último Tornillo, “para continuar hasta la hora de cierre con una pinchada musical que correrá a cargo Rtumba Studios”.
Igulamente, habían organizado una muestra fotográfica que bajo el lema 'Resistencia Llionesa' confeccionaron con instantáneas recopiladas en redes sociales a través de la participación ciudadana.
Todo ello bajo el paragüas de una “ respuesta a la legitimación del constructo político que supone la Comunidad de Castilla y León, basado, entre otras desgracias, en la negación de los derechos soberanos del pueblo leonés, políticas realizadas a espaldas del mismo, oscuros procesos de acumulación capitalista, intereses privados y segundas intenciones”, remarcaron.