Las obras del Torío, cuestionadas en Europa

Parte de las interenciones cuestionadas por AEMS.

Milena Pasetti

Hasta el jueves la ciudad de León será sede de un congreso nacional sobre restauración de riberas de ríos, y será justamente allí donde la asociación “AEMS, Ríos con Vida” denunciará la intervención que la Confederación Hidrográfica del Duero está ejecutando en las márgenes del río Torío, en su paso por el muncipio de Villaquilambre.

Las obras, enmarcadas en el proyecto “Recuperación ambiental del río Torío”, son a entender de un grupo de biólogos locales e integrantes de esta entidad, totalmente “innecesarias y salvajes”.

“Los trabajos que se están haciendo lo que hacen es destruir la naturalidad del río, eliminando vegetación consolidada en la ribera y encorsetando el cauce con emplazamientos de escollera. Es una intervención porque sí, totalmente innecesaria y extremadamente cara”, explicó César Rodríguez, secretario general de AEMS.

La asociación ha girado en septiembre de este año un informe a la Dirección Nacional del Agua, cuya directora Marta Moren está justamente hoy en León para participar del congreso nacional. En él detallan todas las irregularidades que a su entender concurren en la ejecución de esta obra.

“Estas obras, propias de otra época, contravienen la Directiva Marco del Agua y la de Prevención y Evaluación de Riesgo de Inundaciones”, señalan en el texto. Además requieren información sobre la supuesta decisión del Ministerio de Medio Rural y Marino de eximir a esa obra de la necesidad de declaración de impacto ambiental y, por lo tanto, de las correspondientes medidas preventivas.

Al mismo tiempo, han enviado una carta a la Comisión Europea en Bruselas informando de la situación, ya que las obras se financian directamentes con fondos Feder por un total superior a los 50 millones de euros en toda la Castilla y León.

Todo es legal

Por su parte, el presidente de la Confederación Hidrográfica del Duero, Antonio Gato, indicó que la obra cuenta con todos los permisos necesarios “más allá de que pueda gustar más o menos”.

“Esta intervención ha sido muy demandada, que tiene el visto bueno de todos los ayuntamientos, que así lo manifestaron en el período de consultas previas. Y tiene el visto bueno ambiental del órgano competente en el Ministerio, que indicó que era un proyecto respetuoso con el medio ambiente”, precisó Gato.

Sin embargo, reconoció que algunos segmentos de la intervención han sido cuestionados. “La actuación puede gustar más o menos. Es una línea de protección que hubo que hacer luego de que un talud se viniera abajo. La línea general del Ministerio es la de suprimir obstáculos, pero en algún caso como parece que es este, es necesario por razones de seguridad y de protección”.

“Hemos tenido que reforzar la base del talud con una escollera, que es verdad que visualmente no es atractivo. A nadie nos gusta, pero a veces es necesario, como lo han considerado los técnicos. Y sí que ha generado opiniones opuestas, pero reitero, cuenta con el visto bueno ambiental desde el principio del órgano competente. Actuamos siempre con el máximo respeto a la legalidad”, concluyó.

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