Nutrición para bajar los excesos

ileon.com

Enero es el mes de pensar en los excesos navideños y febrero y marzo los de ejecutar un plan para intentar llegar al verano recuperando la figura para poder lucirla en verano. Eso es lo que nos cuenta Luis Alberto Robles Álvarez, dietista y nutricionista en la Clínica 2010 de León, que nos explica algunas recomendaciones para poder recuperarnos de esos excesos gastronómicos tradicionales de las épocas festivas.

Una vez hecho el propósito de cuidarnos más, ¿por dónde debemos empezar? “Tendemos como seres humanos a ponernos fechas para hacer cosas buenas. Si una cosa es buena, que es cuidar la alimentación, da igual la fecha. Pero es más importante estar convencidos de querer hacerlo, que no lo veamos como un castigo, porque si no lo dejaremos pronto.”

“Mi consejo es ponerse en manos de profesionales y seguir sus indicaciones si decide y está convencido de iniciar un tratamiento. Que se olvide de seguir dietas milagro o de aquello que no le convenza, porque a la larga no será efectivo”.

Luis considera que más del 95% de los leoneses no necesitaría ningún tipo de suplementación sino simplemente una reeducación nutricional. En términos generales la mayoría de las personas que bajan de peso lo recuperan en un corto plazo de tiempo y muchas de las que lo mantiene con el tiempo lo vuelven a subir. Según el National Weight Control Registry de EE.UU (el mayor estudio sobre la pérdida de peso exitosa del mundo) las claves de mantener el peso son:

  • Mantener un nivel alto de actividad física, que puede ser desplazarse caminando o en bici o usar el ascensor sólo para subir. Luis indica que un nivel adecuado de ejercicio es una hora al día, que puede conseguirse de diversas maneras.
  • Respetar todas las comidas al día, incluídas la merienda y el tentempié de media mañana. Científicamente está demostrado que esto es importante para mantener la masa muscular y no se deben saltarse ninguna de las cinco recomendadas.
  • Controlarse de forma periódica el peso, vigilándolo pero siendo conscientes de la holgura que debe existir, tanto por arriba como por abajo para no caer en obsesión de un peso fijo.
  • El patrón alimentario no debe tener grandes variaciones a la hora de comer. Muchas veces no nos damos cuenta de que a medida que el tiempo avanza es más fácil mantener el peso y además con el tiempo se consigue una mayor satisfacción personal, que nos lleva a sentirnos mejor

Un aspecto que señala Luis a la hora de evaluar nuestro estado es conocer cuánto tiempo hemos aumentado el peso, un error habitual a la hora de enfrentarnos a una dieta; “si hemos engordado 10 kilos no nos preguntamos si los hemos subido en 2 años, sólo queremos bajarlos en un mes, y ahí vienen los errores de caer en dietas milagro. Hay que mantener un patrón y un equilibrio” indica este experto en nutrición.

La grasa no es la única enemiga de nuestra alimentación

Desmitiendo muchos de los mitos arraigados en la sociedad española Luis Alberto Robles señala que “no creo en las dietas, existe adaptar la alimentación a tus necesidades, a tu día a día. No es lo mismo una persona, con idéntica altura y peso, pero con un trabajo sedentario o hacerlo tirando de cable. Son factores diferentes y por eso necesitan dietas distintas”, desmitificando así muchos mitos sobre la adaptabilidad de las dietas.

La dieta (del griego dayta) significa régimen de vida, y se refiere al tipo y cantidades de alimentos que se consumen de forma habitual. En España dieta se entiende de forma habitual como el régimen alimenticio seguido para lograr unos determinados objetivos de peso, algo que desde el mundo de la nutrición se considera un grave error. “Ponerse a dieta es poner en orden mis alimentos de manera que modifique mis hábitos de forma saludable y mantenga una alimentación similar” recomienda Luis, que apuesta por un conocimiento profundo de gustos y hábitos para diseñar una dieta específica para cada individuo.

Otro problema frecuente en España es el desconocimiento de las cantidades que tenemos que comer, lo que ocasiona problemas a la hora de confeccionar y seguir dietas, “hay un problema en esto, lo que puede llevar a disfunciones desde el punto de vista nutricional. Nos pasa a veces con el postre, que nos lo saltamos aunque no debería ser así, ya que forma parte de la comida”. Luis apunta que la grasa no es la enemiga puesto que en cualquier ser humano necesita de una ingesta de grasa de entre un 20 y 30% de lo que consumimos al día -grasas saturadas menos del 10%-; además recuerda que lo importante es mantener en su proporción todos los alimentos de la pirámide, no su eliminación total por criterios poco objetivos.

No hay ningún alimento que sea malo por sí solo, la magia está en combinarlos de forma adecuada

¿Entonces el mito de qué los gorditos son más felices? “Bajar peso es positivo para la salud, si te sobra, y además es positivo sobre la imagen personal que se proyecta. Pero bajar de peso no tiene que ser un castigo, no tiene que basarse en dejar de comer alimentos, sino de reordenarlos” considera este diestista titulado por la Universidad de Navarra.

La recomendación de Luis es, si hemos cometido un exceso de ingesta de calorías en Navidad, incrementar un poco nuestro consumo de calorías y moderar un poco la ingesta de las mismas. El equilibro es lo que se debe buscar. Algunos trucos son no abusar de las salsas, usar técnicas de cocina sencillas (horno, plancha, etc.), aumentar el ejercicio físico e incrementar la hidratación. Con ellos debería bastar para reequilibrar nuestro cuerpo y sentirnos mejor con nosotros mismos.