Morán afirma que es la UTE de recogida de basuras la que tiene que llegar a un acuerdo con sus trabajadores

Imagen de archivo.

ICAL

El presidente de la Diputación de León, Eduardo Morán, defendió hoy que es la UTE (Unión Temporal de Empresas) Legio VII quien “tiene que llegar a un acuerdo para que los trabajadores del servicio de basuras de la provincia tengan las mejores condiciones” y deja claro que “no tiene que haber una relación directa de la plantilla con la institución provincial o con el Consorcio Provincial de Residuos, Gersul”.

“La Diputación es una parte de Gersul, que firmó un acuerdo con Legio VII, por lo que solo tiene que mantener una relación cordial y llegar a acuerdos para dar cumplimiento al contrato que se firmó en su día, pero la vinculación de los trabajadores tiene que ser directamente con la UTE”, expuso Morán después de que los trabajadores apoyaran el pasado viernes la convocatoria de una huelga indefinida ante la falta de ejecución de los compromisos adquiridos.

En este sentido, Morán explicó que el presidente de Gersul, Santiago Dorado, está trabajando parala actualización de los previos del contrato, “que no se hacía desde 2013”. Para ello, se encargaron auditorías con una empresa externa y ahora se lleva a cabo un trabajo interno con los servicios de intervención de Gersul “para ver si se puede llegar a un acuerdo con las empresas”.

No obstante, el presidente de la Diputación insistió en que “son las empresas las que tienen que hacer un esfuerzo para llegar a acuerdo con trabajadores en ese intento de renovar el convenio colectivo que no se actualiza desde 2012”.

Cabe recordar que el pasado mes de abril, los trabajadores plantearon una huelga indefinida en la recogida de basuras en León de cara a la Semana Santa. La principal demanda de los empleados pasó entonces por la revisión del coste del servicio que la empresa reclama que sea actualizada para aplicar la subida salarial que solicita la plantilla, formada por unos 170 empleados.

A mediados de agosto, los representantes de los trabajadores anunciaron que en el mes de septiembre reactivarán el conflicto, convocando una huelga del servicio de recogida de basuras.

El 18 de agosto, Morán insistió en que esa revisión del coste ya se está estudiando de la mano de los funcionarios de Diputación y de una empresa encargada de una auditoría externa.

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