A juicio por golpear y amenazar a un pedáneo en Garfín (Gradefes)

Carlos S. Campillo/Ical.

La Audiencia Provincial de León acoge el próximo 21 de noviembre un procedimiento contra dos procesados, uno de ellos C.H., fue investigado por el asesinato de Roberto Larralde, pero fue absuelto por el jurado popular que juzgó el crimen. En esta ocasión, C.H. está acusados de los delitos de atentado y lesiones por golpear al presidente de la Junta Vecinal de Garfín, que también figura como procesado.

Según las calificaciones provisionales de la Fiscalía a las que ha tenido acceso este periódico, C.H. amenazó con una barra del hierro al otro procesado, alcalde pedáneo de Garfin, cuando ambos se encontraban en una báscula de pesaje, al tiempo que le decía que “le iba a partir la cabeza y lo iba a mandar al cementerio”.

Al día siguiente, en el mismo lugar, la báscula de pesaje de Garfín, ambos se golpearon. El presidente de la junta vecinal sufrió una fractura en la mano izquierda que precisó para su curación 53 días, todos ellos impeditivos. El otro procesado sufrió contusión malar derecha que tardó en curar un día. La asistencia médica del primero se cifró en 200 euros y la de segundo en 100. Además, el presidente de la Junta Vecinal de Garfín golpeó a otro hombre cuando acudió a separarlos.

Para la Fiscalía, los hechos son constitutivos de los delitos de atentado y lesiones, y de la falta de amenazas de los que es autor C.H. al que reclama dos años de cárcel; un año y medio por el delito de atentado a la autoridad (por golpear al pedáneo) y seis meses por el delito de lesiones. Además multa de 8 meses a 10 euros de cuota diaria, un total 2.400. Por la falta de lesiones, piden multa de 30 días a 10 euros, un total de 300 euros.

En el caso del otro procesado, está acusado de dos faltas de lesiones al que según Fiscalía no procede imponer pena.

Ambas defensas se muestran disconformes con el relato de la Fiscalía. La defensa del pedáneo niega que golpeara al otro procesado y a una tercera persona por lo que pide su libre absolución.

En el caso de la defensa de C.H., asegura que su patrocinado en ningún momento amenazó ni insultó al otro procesado sino que le pedía que dejara de tomar fotografías de los camiones mientras realizaba un pesaje. En cuanto a la agresión, también niega que C.H. golpeara al pedáneo y asegura que el agredido fue su patrocinado, a quien éste propinó un puñetazo en la cara. Por todo ello, reclama la libre absolución de su patrocinado.

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