Isaac, nueve adolescentes y el Círculo Polar
Isaac Álvarez acaba de cumplir uno de sus sueños: conocer el lugar donde el sol no se pone, el Círculo Polar Ártico. Pero no ha realizado esta aventura solo. 9 chicos y chicas de edades comprendidas entre los 14 y los 17 años han acompañado al leonés por diferentes países hasta alcanzar su meta.
Con muchas anécdotas que compartir con los suyos, Isaac recuerda de manera especial lo ocurrido en París. “Mientras esperábamos en la estación para confirmar los billetes hubo un aviso de bomba”. “Fue muy emocionante; acordonaron la zona e incluso vinieron los artificieros para controlar el paquete sospechoso”, comenta.
También en París vivieron otra experiencia al límite cuando a la salida de una boca de metro detuvieron a una carterista.
Pero, sin duda, el momento más especial para Isaac ha sido el de estar charlando y “contando historias con los chicos a las 2.00 horas de la madrugada en el Círculo Polar con el mismo sol que hay en León a las 20.00 horas de la tarde”.
Se trata de la segunda vez que se deja llevar por la aventura en compañía de adolescentes; el año pasado su excursión fue para conocer Europa del Este, y en otra ocasión se marchó con sus hijos y algunos amigos a aprender inglés.
“Es un proyecto personal, me gusta mucho viajar y por ello lanzo ideas a mis conocidos y la gente se va apuntando”. Y, es que, existe un requisito muy importante para poder acompañar a Isaac en sus viajes: “tienen que ser buenos estudiantes, buena gente y conocerme”. Por ello, la mayoría de los jóvenes que acompaña a Isaac se encuentran dentro de su círculo de amistades.
Planes futuros
¿Su próximo itinerario? “Mi hija quiere hacer el interrail, pero aún no tenemos claro que dirección llevaremos, quizás Grecia”. Otra de las ideas en mente es la de “pasar una semana en barco, contratando un patrón, e ir haciendo diferentes escalas para conocer el mar”.
Estación de Amiens.
Una de las condiciones que Isaac tiene en cuenta a la hora de planear los viajes es la de un presupuesto reducido. “Vamos de mochileros. En esta ocasión, de los 14 días solo 5 hemos dormido en albergues, intentamos dormir en los trenes mientras viajamos”.
Otro de los puntos imprescindibles antes de salir de viaje es contar con los imprevistos que a veces provocan “un cambio de ruta”, como cuando llegaron a Copenhague y los trenes estaban cancelados.
El aventurero leonés asegura que se trata de una “experiencia pedagógica maravillosa”, también para él mismo: “Disfruto y aprendo mucho”.
Además, a pesar de lo que se dice, Isaac asegura que “está encantado” de viajar con adolescentes: “Están siempre dispuestos a trabajar, sufrir y colaborar con el grupo, son muy alegres y nada egoístas”.
