Hijos, padres y tecnoaparatos: La batalla continúa

Cartel por el bienestar emocional

El jueves 15 de marzo tendrá lugar en Cepteco la tercera charla que se realiza dentro del III ciclo de charlas-coloquio gratuitas con el título genérico Por el Bienestar Emocional que este centro está organizando. Lleva por título de Hijos, padres y tecnoaparatos: la batalla continúa y se llevará a cabo por Javier Montero, médico de Atención Primaria del SACYL, a quien entrevistamos:

¿Hay una verdadera batalla entre padres e hijos en el uso de las nuevas tecnologías?

Bueno, el uso del término “batalla” no pretende ser un diagnóstico de todas las interrelaciones entre hijos y padres en el uso de la tecnología, aunque es bien cierto que su uso en las familias se está convirtiendo en numerosas ocasiones en fuente de preocupación y conflicto.

En los últimos años, las nuevas tecnologías han invadido nuestras vidas. Y han llegado para quedarse. Las redes sociales ya forman parte de nuestros hábitos de relación y comunicación. Diferentes aplicaciones de móvil nos conectan con el entorno desde los albores del día hasta su ocaso, reclamando nuestra atención de un modo casi permanente. El mundo parece girar a golpe de twit y hasta los presidentes de los países más relevantes hacen sus comunicados empleando estos medios. Todo ello transmite la sensación de que sólo se es si se está dentro de este universo, siendo esto particularmente cierto para las nuevas generaciones. Y si bien es cierto que nos han proporcionado utilidad y bienestar, también lo es que han modificado nuestro modo de vida, y no siempre en nuestro beneficio.

¿Por qué se produce el conflicto?

En el caso de los padres, hay una percepción de un uso de dichos dispositivos por parte de los hijos demasiado prolongado y sin las adecuadas garantías. Tienen temor a su exposición, ya sea en forma de imágenes, de opiniones..., de que su interrelación en las redes les haga correr riesgos. Temen también que dediquen demasiado tiempo a las mismas, al uso de los videojuegos, a que terminen “enganchados” a los mismos. Todo esto les resulta nuevo: nadie les ha enseñado cómo manejar estas situaciones y los patrones educacionales que han recibido no sirven para hacer frente a los conflictos que surgen al tratar de regular el uso de los dispositivos en sus hijos. En consecuencia, no es infrecuente que experimenten sentimientos de angustia e impotencia.

En el lado de los hijos, la ventana al mundo que se les ofrece a través de las pantallas se convierte en un mar de posibilidades donde es irresistible navegar y donde la percepción de peligro no forma habitualmente parte de sus preocupaciones. Los diferentes dispositivos y aplicaciones se han convertido en la fuente preferencial de comunicación con sus pares, en un lugar donde buscar camaradería, aceptación y reconocimiento. El mundo de los videojuegos, en constante desarrollo y de casi ilimitadas posibilidades, se abre para ellos en forma de fuente inagotable de entretenimiento y de lugar de encuentro. Las restricciones de uso que tratan de establecer los padres son vividas con incomprensión como imposiciones, oponiéndose mostrando sentimientos de rebeldía y no infrecuentemente, agresividad.

Todo este panorama, llevado a la vida cotidiana, deviene con frecuencia en conflictos. Enseñar a hijos y padres a conocerse mejor y a prevenir y manejar estas situaciones será el tema principal de la charla coloquio en CEPTECO.

Se está hablando cada vez con mayor frecuencia de la existencia de casos de adicción en el uso de dispositivos móviles y videojuegos. ¿Se trata de una realidad, o forma parte del alarmismo de la sociedad o el sensacionalismo de los medios de comunicación?

Si bien es cierto que para la mayoría de los usuarios de dispositivos móviles su uso no conlleva mayores problemas, es también una realidad que algunas personas muestran una falta de control en su uso, otorgándoles una prioridad en detrimento de otras actividades o intereses vitales diarios, y llegando a desarrollar una conducta mantenida de estas características, a pesar de que conlleve consecuencias negativas en sus vidas. Es en estas personas donde puede hablarse de adicción, y así lo ha reconocido este año la Organización Mundial de la Salud, incluyendo este proceso en su clasificación internacional de enfermedades.

De todas formas, en la mayoría de los casos de conflicto padres-hijos, o entre adultos, estaremos hablando más probablemente de “uso excesivo” o “inadecuado” que de conductas plenamente adictivas.

Y en definitiva ¿qué soluciones pueden ofrecerse ante estas conductas, cuando se tornan problemáticas?

Cuando se trata de verdaderas conductas adictivas, el tratamiento ha de ir encaminado, en primer lugar, al reconocimiento de las mismas por parte del usuario como un problema, con consecuencias socio-sanitarias, lo cual no resulta sencillo al tratarse de hábitos muy accesibles, normalizados y con escasa percepción de peligrosidad por los afectados. La entrevista motivacional puede ser un recurso útil al respecto.

Una vez logrado esto, ha de tratarse de modificar dichos patrones de conducta. No hay tratamiento farmacológico específico para ello. La terapia psicológica cognitivo-conductual ha mostrado ser un enfoque adecuado para este problema de salud.

Mucho más frecuentes, afortunadamente, son los malestares relacionados con el “mal uso” de los tecnoaparatos. En los adultos, el tratamiento pasa nuevamente por el reconocimiento de dicho patrón de uso como un problema y en la instauración de un programa de modificación de dichas conductas. En niños y adolescentes la mejor terapia pasa por la prevención. Y dado que el acceso a los dispositivos móviles va a ser una constante y con tendencia a darse cada vez a menor edad, establecer patrones de uso razonables, enseñarles desde temprana edad a reconocer límites y a cumplirlos, fomentar otras alternativas de ocio y compartir el tiempo que dediquen ante las pantallas, ya sea participando en los juegos, así como comentando situaciones que tengan lugar en las redes y que deseen compartir, son sugerencias de caminos que padres y educadores deben explorar en aras de lograr dicho objetivo.

Etiquetas
stats