Fallece el hijo de uno de los fusilados en Villadangos sin recuperar los restos de su padre
Uno de los familiares de los 71 fusilados durante la guerra civil cuyos restos permanecen desde hace 85 años en el cementerio de Villadangos del Páramo, Rufino Juárez, ha fallecido este miércoles sin poder enterrar a su padre de una forma digna y de acuerdo a los deseos de su familia.
El fallecimiento de Juárez (86 años), hospitalizado desde hace unos días, impide cumplir el anhelo de encontrar a su padre, Rufino Juárez, fusilado en 1936 junto a otros miembros de la Junta Vecinal de Vegas del Condado y enterrado en el cementerio paramés tras su fusilamiento en un paraje del municipio. Otros familiares que llevan a cabo la búsqueda han recordado en redes sociales a Rufino, entre ellos la periodista leonesa Olga Rodríguez, donde también la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica (ARMH) ha rendido homenaje al tesón de Rufino.
Las exigencia del Ayuntamiento de Villadangos de licencias de obras y ambiental y la decisión de someter a un polémico concejo la autorización de la Junta Vecinal, que la denegó con el voto encontra de 22 vecinos, han retrasado la previsión inicial de realizar las excavaciones en septiembre. El 10 de agosto los familiares ya protestaron por los retrasos, recordando la urgencia por la avanzada edad de alguno de los descendientes, y al contar con la autorización concedida por parte de la Junta de Castilla y León. Pero el consistorio gobernado por Alejandro Barrera mantuvo sus condiciones y la negativa del concejo, que la Junta considera no válida, han retrasado aún más los permisos para las exhumaciones.
El próximo 7 de septiembre el Comité Técnico del Consejo Asesor de la Memoria Histórica reautorizará la exhumación de restos de represaliados en el cementerio de Villadangos, tras modificar la ARMH su propuesta para ajustarla aún más a la localización exacta de los fusilados. Entonces se reactivarán las licencias municipales y se podrá buscar a los 71 fusilados que fueron enterrados en el cementerio. El alcalde de Villandagos, ante la polémica generada por la negativa inicial, ha pedido “calma y buena vecindad” para afrontar el proceso.