Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas caen en 2017 un 31,5%, tres puntos menos que la media nacional
Las ejecuciones hipotecarias sobre viviendas se redujeron en Castilla y León el pasado año un 31,5 por ciento, al pasar de las 1.015 a las 695, retroceso que se traduce en tres puntos menos que el experimentado por el conjunto de España, donde la caída fue del 34,2 por ciento, hasta totalizar 27.171, según los datos ofrecidos hoy por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
De las 695 viviendas hipotecadas en la Comunidad, 606 eran de segunda mano y 89 nuevas, mientras que 326 estaban en manos de particulares y 369 eran propiedad de entidades jurídicas. Además de las viviendas, el pasado año se ejecutaron también en Castilla y León 502 fincas rústicas, 173 solares urbanos y 1,055 de otra naturaleza urbana, que sumadas a las propias viviendas alcanzaron las 2.425.
Las comunidades con mayor número de certificaciones por ejecuciones hipotecarias el pasado año fueron Andalucía (13.644) y Valencia (10.212). Por su parte, Navarra (206) y Cantabria (341) tuvieron los menores.
Tomando como referencia las hipotecas constituidas en el periodo 2003-2016 sobre el total de fincas, el 0,36 por ciento de las hipotecas constituidas iniciaron una ejecución hipotecaria en el año 2017. Por comunidades, Murcia (0,58 por ciento), Valencia (0,55) y Andalucía (0,48) registraron los valores más altos. Por su parte, País Vasco (0,06) y Navarra (0,13) se situaron en el extremo contrario, mientras que Castilla y León se localizó cerca de la media nacional, con el 0,34 por ciento.
Si se analizan solo los dato del cuarto trimestre del año, en Castilla y León se ejecutaron 151 viviendas, un 20,1 por ciento menos que entre septiembre y diciembre de 2016. A excepción de seis, todas era viviendas de segunda mano. Además, también se ejecutaron 18 fincas rústicas, 32 solares y 157 fincas de otro tipo.
