David Álvarez cree que sus hijos le tendieron una trampa

El empresario leonés David Álvarez, fundador del Grupo Eulen, ha calificado como “una trampa” la propuesta de cinco de sus hijos para que vuelva al consejo de administración del El Enebro, la sociedad patrimonial familiar que dueña de la bodega Vega Sicilia.

Álvarez mantiene una tensa disputa con cinco de sus siete hijos, luego de que éstos aprobaran cesarlo como consejero en la sociedad familiar. Esta semana, los “díscolos” le ofrecieron volver a ocupar su puesto, con las mismas facultades que poseía antes de la destitución.

Según informaron en un comunicado los tres consejeros cesados (el propio Álvarez y sus hijos María José y Jesús David), “la pretendida oferta de paz que se quiere ahora vender no se corresponde en absoluto con la posición que los cinco hijos rebeldes persisten en mantener de negar a su padre el derecho de usufructo y los derechos de voto sobre la mitad de las acciones de la compañía”.

“Resulta sorprendente que habiendo decidido el pasado 27 de enero repetir la destitución de su padre y hermanos acordada el 18 de enero de 2010, los hijos disidentes decidan ahora, tres semanas después, en llamativa contradicción, designarles miembros del consejo de administración”, remarcaron.

El motivo de la negativa radica en lo que califican como un “artificial montaje”, con el objetivo de “lavar su mala imagen” para tratar de “evitar los efectos de una más que probable sentencia favorable a David Álvarez”.