Cae una banda criminal internacional dedicada al asalto y robo de viviendas habitadas

Entrada de la Guardia Civil en uno de los pisos utilizados por la banda criminal.

Redacción ILEÓN

La Guardia Civil ha detenido por el momento a siete personas por formar parte de una banda criminal de origen albanés que se dedicaba al asalto y robo de viviendas habitadas que habían perpetrado numerosos actos violentos en varias provincias españolas.

Por el momento, en la operación policial internacional se han resuelto al menos 40 robos de una gran cantidad de joyas, así como dinero en efectivo y tecnología en las provincias de León, Salamanca, Valladolid, Palencia, La Rioja, Navarra y Zaragoza. El valor aproximado del material incautado ascendería a unos 800.000 euros.

La llamada Operación Rovisa se puso en marcha cuando en el pasado mes de marzo de este año 2022 se cometieron una serie de robos en viviendas en la Región Leonesa, en concreto en la provincia de Salamanca, que fue el primer punto localizado de su acción organizada, los cuales causaron gran alarma social entre los ciudadanos. A partir de ahí, la operación fue dirigida por el Juzgado de Instrucción número 2 de Salamanca.

Los agentes de la Guardia Civil ataron cabos rápidamente, dándose cuenta de que los autores de estos asaltos podrían ser los mismos que habían realizado otros robos del mismo tipo en otros puntos de España.

Así, en primer lugar se consiguió aclarar que varios de los presuntos autores, de origen albanés, utilizaban el aeropuerto de Lisboa para desde allí hacer sus entradas y salidas de España precisamente con la finalidad de complicar la labor de investigación y esclarecimiento de los hechos de la Guardia Civil.

De este modo, en la operación pasó a colaborar la Polícia de Segurança Pública de Portugal, así como el grupo de trabajo de la policía de Albania. Todos los agentes contaron con la coordinación de la agencia europea de policía Europol, en el marco de la plataforma europea contra las amenazas criminales EMPACT OPC.

Esta coordinación internacional y posteriores averiguaciones permitieron conseguir pruebas de que el grupo criminal se había ido especializando en gran medida con el paso del tiempo, actuando de forma itinerante. Y de hecho, con el regreso del horario invernal, los guardias detectaron que habían vuelto a actuar en España estableciendo una base de operaciones en Gandía (Valencia). A partir de entonces era desde allí desde donde se desplazaban a diferentes lugares de la geografía española para una nueva oleada de robos con fuerza en viviendas que se encontraban habitadas.

Más complicado aún, los cabecillas del grupo cambiaban de nombre de forma habitual en su país de origen, de modo que alguno de ellos llegó a contar con hasta tres identificaciones distintas, lo cual pese a las dificultades fue desentrañado por la Guardia Civil. Igualmente, según explica el Instituto armado en una nota de prensa, evitaban el empleo de telefonía móvil para sus comunicaciones internas. En su lugar, empleaban walkie-talkie, así como placas de matrículas falsificadas, medidas todas para evitar ser descubiertos.

Registros en Madrid y Valencia

En el transcurso de la operación, la GUardia Civil realizó un total de cinco entradas y registros en viviendas de Valencia y de Madrid. Así, finalmente se detuvo a siete integrantes del grupo criminal y se intervinieron numerosas y valiosas joyas, dinero en efectivo, tecnología variada y material utilizado para cometer los robos.

Durante el tiempo que ha durado la investigación, se han reunido pruebas suficientes a priori de la participación de los detenidos en por lo menos 40 episodios delictivos en las provincias de Salamanca, Valladolid, Palencia, La Rioja, Navarra y Zaragoza, sumándose tres de ellos en la provincia de León y en concreto dos en viviendas de Villarodrigo de las Requeras y uno más en León capital.

Etiquetas
stats