El Ayuntamiento de León aprueba la Zona de Bajas Emisiones para restringir el tráfico solo si hay contaminación
El Pleno del Ayuntamiento de León ha dado luz verde este viernes al proyecto de Zona de Bajas Emisiones de la ciudad, que se aprueba con dos años de retraso sobre la previsión legal de estar aprobada en diciembre del año 2023. La ordenanza ha recibido 16 votos a favor de los grupos de PSOE y UPL, la abstención del concejal no adscrito y el voto en contra de los concejales del PP y Vox.
El debate ha resultado acalorado por el auto reciente del TSJ de Castilla y León por un recurso del PP que ha suspendido parte de las peatonalizaciones del centro debido a que pueden no contar con soporte legal suficiente. Este hecho, que ha sido recordado por el PP como parte de su argumento para considerar que falta planificación en la movilidad en la ciudad, ha sido rebatido por PSOE y UPL señalando la ordenanza aprobada dará soporte legal para el resto de decisiones de movilidad.
El concejal del área de movilidad, Vicente Canuria, glosó las bondades del proyecto, “una normativa que se enmarca en el compromiso de contribuir a la reducción de la contaminación y a la mejora de la salud y la seguridad de la población”. El concejal puso en valor las nuevas peatonalizaciones que incluye, el servicio de préstamo de bicis o la ampliación de los carriles bici, así como la reestructuración de la red de autobuses. “Somos conscientes que la implantación de la Zona de Bajas Emisiones han sido controvertidas en muchos municipios pero entendemos que esta ordenanza es la herramienta que complementará las medidas vigentes que permitieron las peatonalizaciones del casco histórico y Ordoño II, proyectos aplaudidos por la población”, señaló.
El portavoz del PP, David Fernández, ha calificado la ordenanza de “engaño, chapuza e ilegalidad”. Con duras críticas al plan de movilidad del Ayuntamiento el portavoz señaló que su formación no estaba en contra de las peatonalizaciones pero sí si éstas se realizan sin previsión y de forma chapucera. El PP acusó a José Antonio Diez de haber sembrado con sus medidad de movilidad “el caos en el tráfico” generando problemas de aparcamiento y haber “encarecido el día a día de los leoneses” e incrementar la contaminación por haber alargado los trayectos en coche.
Desde UPL su portavoz, Eduardo López Sendino, incidió en que la ordenanza resolverá los problemas legales que en todo caso se hayan podido producir en el caso de las peatonalizaciones, criticando la postura del PP de voto en contra y apoyando la ordenanza por ser obligatorias las ZBE. La portavoz de Vox, Blanca Herreros, tiró del argumentario habitual de la extrema derecha para rechazar la ordenanza acusando de “fanatismo climático” al PSOE y asegurando que pretenden que la gente de la ciudad vaya en bicicleta, “algo que los leoneses rechazan”.
El alcalde José Antonio Diez ha agradecido a los grupos las aportaciones realizadas por todos los grupos al proyecto jurídico, especialmente al grupo de UPL, y ha entrado de forma irónica a las críticas del portavoz del PP, David Fernández, “mejor para usted si soy muy malo”.
La ordenanza pasa ahora a fase de exposición pública de un mes para recibir alegaciones o aportaciones y volverá a aprobación definitiva al pleno municipal para su entrada en vigor.
El perímetro de la Zona de Bajas Emisiones
La Zona de Bajas Emisiones diseñada por el Ayuntamiento de León espacio tiene una superficie de 116 hectáreas y un perímetro de 4,5 kilómetros que abarcan el centro de León con su Ensanche y el Casco Antiguo, peatonalizado hace años, con el Barrio Húmedo y el Barrio Romántico incluido. Se restringirá el tráfico solo en episodios de contaminación, algo que con los sistema de detección actuales noo se suele producir.
El perímetro que recorre es desde las avenidas Condesa de Sagasta, Facultad de Veterinaria (entre Guzmán y Lancia), calle Lancia y Alcalde Miguel Castaño (entre Correos y la calle López de Fenar). Posteriormente sigue por la calle López de Fenar, Prado de los Judíos, Murias de Paredes, Caño Badillo, Salvador del Nido, Panaderos, Arquitecto Ramón Cañas del Río, Perales, Alfonso El Justiciero hasta llegar a la Plaza de El Espolón, continuando por la avenida Álvaro López Núñez hasta la avenida de los Reyes Leoneses en la rotonda de Eras (entre calle Cruz Roja y plaza de San Marcos) y la plaza de San Marcos donde conecta con la Condesa de Sagasta.
Según la nueva ordenanza del Ayuntamiento de León, los vehículos autorizados para acceder a la ZBEE estarán sujetos a la declaración de alerta por episodio de contaminación de aire que active la autoridad municipal.
Podrán circular en la ZBEE de forma libre y sin necesidad de autorización (independientemente de los niveles de contaminación) los siguientes vehículos: ciclos, bicicletas, vehículos de movilidad personal, vehículos de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, de emergencia y con la etiqueta medioambiental Eco y ‘0 emisiones’, siempre que estén identificados.
Necesitarán autorización municipal, cuando se alcancen niveles determinados de contaminación, los vehículos de etiqueta C, servicios sanitarios, correos, de emergencias, transporte urbano, taxis, mercancía, servicios educativos o de administraciones públicas. También los coches de usuarios de garajes y residentes sin garaje, los trabajadores, personas con discapacidad, mayores de 65 años o accesos a segundas viviendas.
El acceso a la Zona de Bajas Emisiones se controlará mediante un sistema automático y una plataforma tecnológica a designar por el Ayuntamiento de León. Un sistema que comprobará si cada vehículo puede o no acceder a la ZBE.
Además de la Zona de Bajas Emisiones Ensanche (ZBEE), el Ayuntamiento de León creará las Áreas de Prioridad Peatonal (APP) como parte de la Zona de Bajas Emisiones. Serán aquellas de prioridad peatonal, con acceso de vehículos parcial o totalmente restringido, como es el Casco Antiguo y el Barrio Romántico y otras calles ya peatonalizadas.