Las agresiones al personal sanitario cayeron en el año de la pandemia
Las agresiones a personal de Sacyl cayeron un 11,1 por ciento en 2020, así como el número de incidentes, que se redujo un 13,2 por ciento. Además, desde que en 2017 se tocara techo y se contabilizaran 639 agresiones a profesionales sanitarios, esta lacra suma tres años consecutivos descesos con una caída global del 27,5 por ciento.
En la provincia de León bajaron un 29,5 por ciento los incidentes (31) y un 21,7 por ciento los trabajadores implicados, que fueron 36.
Estos datos se desprenden del balance de la Sección de Agresiones al personal de centros sanitarios del Observatorio de Castilla y León, con motivo de la celebración del Día Europeo contra las Agresiones a Profesionales Sanitarios, y que ponen de manifiesto que las cifras bajan en todas las categorías, salvo en el caso de celadores, que con relación a 2019 se incrementa un 136,4 por ciento, al pasar de 11 a 26.
En la red de Sacyl, el año pasado se registraron 162 agresiones a profesionales de enfermería, 34 menos que hace un años, también hubo 162 médicos agredidos, frente a los 196 del ejercicio anterior; 63 técnicos en cuidados auxiliares de enfermería, por debajo de los 80 registrados hace un año; 26 celadores, frente a once, y 30 de otro personal, frente a 42.
Por áreas de salud, las agresiones bajan en todas las provincias a excepción de Valladolid, Zamora y Segovia. Así, en Valladolid Oeste hay un incremento del 23,5 por ciento, hasta las 63, mientras que Valladolid Este la subida es del 6,4 por ciento, con un centenar de afectados. Por su parte, en Zamora el crecimiento es del 45, por ciento (35) y en Segovia del 53,8 por ciento (40).
Los mejores baremos se registraron en Palencia, con un descenso del 52,2 por ciento (11), en Ávila, donde la caída fue del 50 por ciento (25), en Soria, con una reducción del 42,1 por ciento (11) y en El Bierzo, donde la disminución fue del 39,5 por ciento (23). En Salamanca cayeron un 28,6 por ciento (45), en León un 21,7 por ciento (36) y en Burgos un 10 por ciento (72).
En cuanto al ámbito asistencial, la mayoría de las agresiones fueron en los hospitales, con 249, por encima de las 211 que se registraron en los centros de salud y consultorios locales. El resto se repartió entre las dos de Emergencias y una en gerencia de área. Por sexos, la mujeres sufrieron mayor número de agresiones que los hombres, con un 82,2 y un 15,8 por ciento, en cada caso.
Las agresiones físicas caen
Por lo que respecta al tipo de agresión, las físicas se redujeron al pasar de las 95 de 2019 a las 91 del pasado ejercicio. Del total, 83 se registraron en hospitales, siete en consultorio y una en emergencias.
El perfil del agresor se correspondió en el 88,5 por ciento de los casos con una única persona, varón (53,6 por ciento) y usuario (63,2 por ciento). Además, el 8,2 por ciento fueron reincidentes. Las causas más comunes se correspondieron con la disconformidad con la atención (41,4 por ciento), el trastorno y conductas problemáticas del usuario (14,3 por ciento), demandas del usuario (0,2 por cineto), los tiempos de espera (7,9 por ciento), disconformidad con el trato (7,1 por ciento) y las adicciones (4,1por ciento).
Denuncias
Por otra parte, en 2020 los profesionales de Sacyl presentaron 33 denuncias por vía penal (26 menos que el año anterior). Del total, 22 corresponden a Primaria, diez a hospitales y una a Emergencias. Desde 2005, se han dictado 243 sentencias condenatorias por agresiones.
Ademas, sobre expedientes sancionadores cabe resaltar que en 2020 se realizaron 18 peticiones de incoación, de las que, de momento, hay cinco resoluciones sancionadoras.
Por último, indicar que se recibieron tres avisos del botón de alarma ubicado en los equipos informáticos de los profesionales de las Gerencias de Atención Primaria en los que está instalado. De ellos, dos en El Bierzo y uno en Palencia.
Satse incide en que el 40% de las agresiones son a enfermeras
El Sindicato de Enfermería, Satse, en Castilla y León denuncia que las enfermeras vuelven a ser el colectivo que más agresiones sufre en el Sistema Regional de Salud, con un 39,3 por ciento del total en 2020, y pese al descenso en el número de trabajadores agredidos en los centros sanitarios de la Comunidad, una circunstancia se suma a las “malas condiciones laborales y a las bajas retribuciones que padecen los profesionales de Enfermería”.
Según los datos del Observatorio de Agresiones a Sanitarios de Castilla y León, de los 463 trabajadores agredidos en 2020 en esta Comunidad, 182 fueron enfermeras, una cifra que supone un problema grave porque sigue siendo el colectivo sanitario más afectado y porque, aunque el total de trabajadores agredidos desciende un 11,1 por ciento frente a los datos de 2019, en el caso de las enfermeras y enfermeros, ese descenso solo es del 5,2 por ciento.
Satse sigue alertando de que las enfermeras son la puerta de entrada al sistema sanitario y, por tanto, el colectivo que más padece esta situaciones, por lo que exige a la Junta de Castilla y León que ponga en marcha más medidas, tanto de protección como organizativas, que atajen este problema, ya que es intolerable que acudir a su puesto de trabajo suponga un riesgo para los profesionales de Enfermería. La Consejería de Sanidad debe adoptar todas las medidas y actuaciones necesarias a nivel preventivo y de actuación en defensa del profesional tras ser agredido.
El Sindicato de Enfermería también pone de manifiesto que el de Enfermería es un colectivo mayoritariamente femenino, lo que puede estar incidiendo en que se produzcan más ataques contra estas profesionales sanitarias por ser mujeres.
