La Catedral de León, obligada por Ley a un día de visita gratis cada la semana, sólo ha ofrecido 15 minutos sin que la Junta sancione
Manifiestamente ilegal es cumplimiento que ha mantenido la Catedral de León respecto a la obligación que tiene el templo gótico, el principal monumento turístico de la capital leonesa, de ofrecer un día entero de acceso gratuito cada semana para todos sus visitantes. Una obligación que le impone la Ley de Patrimonio de Castilla y León desde hace 23 años, al tratarse de un edificio catalogado o protegido como Bien de Interés Cultural (BIC). Y que no cumple ni por asomo.
Esa Ley autonómica, recién actualizada, obliga a todos los propietarios de monumentos protegidos a ofrecer y a dar a conocer que puede ser visitada sin pasar por taquilla al menos un día a la semana, obligatoriamente. Eso son cuatro días al mes o 42 a lo largo del todo el año. Sin embargo, en el caso de la Catedral de León, lo que debería ser una jornada completa semanal exenta de cobro, en realidad este verano ha llegado a ser penas a 15 minutos durante toda la temporada alta, es decir, del mes de junio al de septiembre. Se trata de los meses del año con mayor afluencia de manera abrumadora.
Pese a esta flagrante incumplimiento, la Junta de Castilla y León, que debe vigilar y hacer cumplir su propia norma, no hace nada al respecto y actúa con total permisividad hacia el Obispado de León, ya que es la Diócesis la responsable del primer templo de la provincia. Jamás ha abierto un expediente por este motivo.
El área de Patrimonio del Servicio Territorial de Cultura, Turismo y Deporte de la Junta es quien debe garantizar que los turistas y visitantes puedan acogerse a esta ventaja de la Ley. Todos los años reclama a las instituciones o particulares responsables de cada BIC que comuniquen el régimen de visitas gratuitas que establece para cumplir con la norma autonómica. En el caso de la Catedral, consta oficialmente que permite esa exención de pago a los visitantes entre las 11.30 y las 13.30 horas de las mañanas de cada domingo, entre junio y septiembre. El resto del año, entre octubre y mayo, se ha determinado que sea de 17.30 a 19.00 horas de cada martes.
“Abandonen el templo”
La limitación a apenas dos horas, y no a una jornada completa, ya incumplía la Ley. También el hecho de no detallarlo con claridad tanto en el propio monumento como en su web, cosa que tampoco ocurre. Pero en la realidad ha ido todavía más allá. Y es que en esa franja horaria establecida los domingos tienen lugar tres misas en la Catedral, como aparece reflejado en su propia web. Y en ella también se aclara el truco por el cual se impide a los turistas y visitantes hacer uso de esa gratuidad: “Durante la celebración del culto, la Catedral permanecerá cerrada al turismo durante el tiempo que dure el acto”. Así que en realidad lo que los visitantes se encuentran en que se les impide el paso también entre esas dos horas.
La única excepción dura menos de 15 minutos, poco antes del último oficio religioso, cuando se abren las puertas centrales del templo y se permite el acceso libre, pero a la carrera, sin tiempo para nada. Porque la megafonía se encarga de recordarlo de manera tajante a quienes no acudan a la misa: “Abandonen el templo porque no es tiempo para la visita turística”. En español y en inglés. Empleados de la Diócesis se ha encargado cada domingo de sacar a todo el mundo que se encuentra dentro, unos, y de cerrar las verjas exteriores, otros, mientras los turistas, muchas veces indignados, se quedan agolpados en el exterior.
No salen de su asombro al comprobar que, de este modo, no pueden visitar la Catedral ni siquiera pagando, aunque no quisieran ejercer su derecho a entrar gratis. También se les indica que ni siquiera permanece abierto en toda la mañana del domingo el Museo Catedralicio, a pesar de que tiene acceso propio e independiente de la iglesia gótica.
Nadie hace nada
La Delegación Territorial de la Junta lleva años actualizando los datos de visitas gratuitas de todos los monumentos catalogados y que deben cumplir con la Ley. Sin embargo, a pesar de casos tan sangrantes como el de la Catedral de León, y casos muy similares como la Seo de Astorga o los edificios de Gaudí en Astorga y León, no ha abierto un sólo expediente sancionador al respecto, según han confirmado durante los últimos años fuentes oficiales de la administración autonómica.
También se ha hecho eco de la gravedad de este incumplimiento y esta permisividad el Procurador del Común (defensor del pueblo de Castilla y León) sin que se hayan tomado cartas en el asunto. El propio consejero de Cultura, Gonzalo Santonja, cuando formaba parte de Vox dentro del gobierno autonómico en pacto con el Partido Popular (PP), admitía que se estaba produciendo un claro “incumplimiento” con la aplicación de esta Ley propia. Pero se quitaba de encima gran parte de su responsabilidad, culpando a la falta de celo en su aplicación por parte de las delegaciones de la Junta en cada provincia.
