La Región Leonesa percibe un 20% menos de PIB per cápita que la castellana

La Región Leonesa sufre tal apagón estadístico al no haber ninguna institución ni autonómica ni estatal ni europea que coteje en conjunto los datos de sus tres provincias (León, Zamora y Salamanca) que la enorme diferencia entre las dos regiones que la componen (la del Reino de León y la mutilada Castilla La Vieja sin La Rioja ni Cantabria) es invisible a todas las autoridades.

Es tal la diferencia que, de media, un zamorano gana un 36% menos que un burgalés y un 34,3% que un soriano (y un 29,6% menos que un vallisoletano o un 27,4% menos que un palentino). Parecido le pasa a un habitante de la provincia leonesa: con los datos provincializados del PIB per cápita ganaría un 27,5% menos que si viviera en Burgos y un 26% menos que si lo hiciera en Soria; y un 21,6% que en Valladolid o un 19,5% que en Palencia. Los salmantinos no andan mejor, porque la media comparada les da, por el mismo orden de provincias comparadas, que ganan menos de un 29,6%, un 28,10%, un 21,5% y un 23,6%.

Estas estadísticas se han realizado no por las autoridades autonómicas, estatales o europeas. No. Se basan en el 'Informe sobre población, renta y empleo en las tres provincias leonesas 2024' de Proyecto León, que muestra “la evolución comparativa de las provincias similares al inicio del proceso autonómico 1983-2023 y en el último quinquenio” según reza su subtítulo. Es decir, un grupo de personas dedicadas durante años a bucear en las estadísticas provincializadas (se pueden consultar sus nombres al final del documento al que se puede acceder en el enlace anterior) tienen que mostrar con datos –a veces prácticamente imposibles de conocer y de tabular con una base clara y una regularidad difícil de conseguir para dar calidad suficientes a las tablas a lo largo de los años como ocurre con El Bierzo– la debacle poblacional del País Leonés y la enorme diferencia económica con las seis provincias castellanas en conjunto que quedan de la región de Castilla La Vieja en la actual autonomía creada sin referendum en 1983.

Lo que gana de media un leonés frente a un castellano

Es un arduo trabajo, que ILEÓN también realiza, en el que se han desvelado estadísticas tales como que Castilla aumentó su población activa cuatro veces más que la Región Leonesa en los últimos 40 años, o que la provincia de León creció un veinte por ciento menos que la autonomía de Castilla y León y un cuarenta menos que España en este siglo XXI, según se desprende de los datos del Producto Interior Bruto del INE.

Unos datos que, cruzados con los habitantes de cada provincia dan un PIB per cápita provincial. Y en esto la Región Leonesa tiene las de perder ya no sólo con España y la autonomía castellana y leonesa, sino que se queda a muchísima distancia de los restos de Castilla La Vieja. En concreto, cada habitante del País Leonés gana unos 22.259 euros mientras que la media de la Comunidad birregional es de 24.868 (es decir, gana 2.609 euros menos; un 11,79%). Con España la diferencia es de un 10,5% menos (2.209 euros) y con la región castellana la diferencia es ya notable: 4.431 euros (un 19,5%).

Por provincias, León tiene un diferencial con la actual autonomía de Castilla y León de 2.232 euros (-9,86%), con España de 3.159 euros menos (-13,96%) y con Castilla La Vieja de 3.954 euros por debajo (-17,47%). Zamora, en el mismo orden, de 3.637 euros menos (-17.13%), 4.564 por debajo de la media nacional (-21,5%) y de 5.359 euros menos (25,3%) con las provincias castellanas. Salamanca más o menos igual: 2.598 euros menos que la media autonómica (-11,67%), 3.525 por debajo del la del resto del país (-15,8%) y un diferencial negativo de 4.320 (-19,4%) con la Castilla sin La Rioja y Cantabria.

Diferencias de hasta un 36% de sueldo

Los datos de la tabla son significativos cuando se comparan provincias leonesas y castellanas. Las tres del País Leonés tienen un PIB per cápita similar desde los 22.231 euros de Zamora a los 22.270 de Salamanca y los 22.636 de León. En comparación Burgos tiene 28.863, Soria 28.526, Valladolid 27.502 y Palencia 27.047 euros. Sólo Segovia es similar a las leonesas, con 22.523, mientras que Ávila sí tiene unos datos inferiores con 20.831 euros en el año 2021.

Esto implica que, con las cuatro provincias motoras de Castilla, un trabajador en León, de media, ganará un 27,5% menos que uno de Burgos, un 26% menos que un soriano, un -21,6% que uno de Valladolid, mientras que un palentino ganará un 19,5% más. Los zamoranos son los que peor lo tienen, ganando un 36% menos que un burgalés, un 34,4% menos que un soriano, un -29,6% que un pucelano y un 27,4% menos que un palentino. Los salmantinos un 29,6% por debajo que uno que trabaje en Burgos, un -28,1% que alguien con empleo en Soria, un -23,6% que un trabajador de Valladolid y un 21,5% inferior que uno con contrato en Palencia. Respecto a los españoles, los leoneses ganan un 14% menos (3.159 euros de sueldo por debajo de la media), los zamoranos un -21,5% (-4.564) y los salmantinos un 15,8% por debajo (con 3.525 euros de diferencia).

La falta de estadísticas concretas de una Región Leonesa ocultada por todas las autoridades y funcionarios de las administraciones públicas desvelan una situación sorprendente, pero totalmente desconocida para los que plantean las políticas europeas de desarrollo y convergencia. Mientras la Región Leonesa tiene un diferencial por debajo de la media española de un -15,9% (vamos, que se dejan 3.536 euros de sueldo al año comparado con cualquier otro español), la región castellana está por encima de la media nacional por un 3% en positivo (759 euros más).

Efecto estadístico perverso que beneficia a Castilla

Es la debacle leonesa la que hace ver cuando se bucea provincialmente en las estadísticas nacionales y europeas (y se suman a mano) que la Comunidad Autónoma de Castilla y León se desarrolla por debajo de la media nacional un -3,73% (797 euros menos que el PIB estatal dividido entre todos los españoles) creando una falsa imagen de que esta autonomía está poco desarrollada económicamente y necesita ayuda.

La falta de estadísticas oficiales unificadas de las tres provincias leonesas –donde se está produciendo un dramático desplome económico y poblacional no detectado por las autoridades– provoca situaciones tan aberrantes como pensar que Castilla, un 20% por encima de la Región Leonesa y por encima de la media nacional, es una región en crisis. Pero es que no supera el 3% de la media nacional por que dos de sus seis provincias, Segovia y Ávila, no van al alimón de las que tiran de esta región desmembrada; porque si fuera por las cuatro provincias motoras (Burgos, Soria, Valladolid y Palencia) superaría respecto a la media española 2.195 euros más (un 7,9%), a la actual autonomía un 11,2% (3.122 euros más) y a la propia Castilla La Vieja (sin Cantabria y La Rioja) un 5% más (1.400 euros).

Es decir, las provincias de la Comunidad autónoma más pujantes están un 25,8% por delante de las tres leonesas en sueldo medio. Trabajar allí supone (siempre en una media) ganar unos 5.400 euros más al año que un leonés, un zamorano o un salmantino.

ADVERTENCIA DE PROYECTO LEÓN

Unos datos que serán peores en los siguientes años porque la pandemia no le fue tan 'mal' económicamente a León como a Castilla

El informe de Proyecto León apunta en sus conclusiones más o menos lo mismo: “Las tres provincias leonesas reflejan un nivel de renta bajo, y alejado de la media nacional y de la media castellana. La renta castellana está por encima de la media nacional. Ello no obsta que este parámetro ha sido el de mejor evolución individual entre los tres considerados, ya que mejora más que el empleo y supera la pésima evolución de la demografía con amplitud”.

Pero hay un detalle que aparentemente parecería bueno, pero que puede llegar a ser escalofriante: la Región Leonesa aumentó un 5% su PIB durante la pandemia con respecto a la castellana. Es decir, los datos que se ofrecen del PIB per cápita de 2021 “están inflados”, pero se prevé que caigan de nuevo en los siguientes años con los datos consolidados del INE, teniendo en cuenta que el Instituto Nacional de Estadística tarda dos o tres años en dar los datos definitivos del Producto Interior Bruto de cada provincia.

¿Pero cómo puede ser que a las provincias leonesas les fuera mejor en pandemia que a las castellanas? Uno de los firmantes del estudio de Proyecto León, Javier Callado Cobo, lo explica así: “Lo que ha pasado con la pandemia que es que en realidad la Región Leonesa sufrió un ascenso muy fuerte porque mientras el resto del país paraba y claro, dejaban de producir riqueza, los sectores esenciales leoneses siguieron trabajando. Y esto ocurrió porque los leoneses tenemos una cuota muy alta de empleo en producción de alimentos, en energía y en producción de medicamentos, por lo que nuestra producción no caía como en otras provincias. De tal manera que el PIB per cápita durante la pandemia se sostuvo; pero en Castilla —que cerraron las industrias, sobre todo las fábricas de coches–, sí sufrió mucho más”.

“Durante los dos años de pandemia en números aparentemente ha subido mucho la Región Leonesa: ha aumentado cinco puntos sobre la media anterior del país. Pero hay que dejar claro que es un artificio estadístico que no durará: es una situación coyuntural que ya vamos a ver el año que viene cuando pongamos la previsión de 2022, porque ya están todos los sectores trabajando aunque no estén totalmente regularizados, que otra vez el País Leonés volverá a caer en la renta de sus ciudadanos”, continúa.

Las provincias leonesas pararon mucho menos durante la pandemia: “Nosotros no paramos de hacer chorizos ni penicilina ni de producir kilovatios. Nosotros seguimos produciendo porque los nuestros eran sectores esenciales, así que la mayoría de trabajadores leoneses que producen el PIB no pararon, mientras que los de Castilla sí. Porque allí esas industrias eran sectores no esenciales, por lo que el PIB de esas provincias castellanas cayó fuertemente. Pero cuando todo se normalice, la diferencia volvera a ser pero mucho mayor a favor de ellas respecto a las leonesas”

Y vaticina que “el año que viene el informe la diferencia será mucho mayor que la del 20% de ahora. Mucho más porque en Castilla ya todos los sectores arrancaron el año 22. Las fábricas ya estaban funcionando, aún con desajustes por la crisis de suministros, pero ya estaban en marcha- O sea que e 2023 vamos a volver a ver todavía más gruesas diferencias por el evento estadístico que se produjo en pandemia; que dejará de tener efecto para volver a la normalidad, que es que León tiene una renta muy inferior a la castellana”. 

La falta de estadísticas, desastre para el País Leonés

“El desfase será el que había siempre, un tremendo desastre”, se desespera Callado. “Evidentemente con estas perversiones de falta de estadísticas es imposible solventarlo, claro. Imposible hacer alguna política de nada. Porque no se visibiliza el problema leonés. Es que tú lo que no mides no se mejora. Eso es un lema de gestión. Todos los que hemos dirigido equipos y empresas lo sabemos, lo que no se mide es lo primero que te enseñan en un máster. Lo que no se mide no se mejora. Esto es así. Es un axioma de gestión”, pone de manifiesto el experto.

“Entonces, lo mejor para no mejorar algo, es que no se vea”, afirma ante la política de la Junta de ocultar las estadísticas de las regiones de la Comunidad autónoma. “No se mide. O si se mide se lleva en secreto. Y le dicen al Consejo Económico y Social: 'Sácame una estadística, pero no por grupos. Sácame la lineal'. Y luego sale Mañueco diciendo que la comunidad autónoma va muy bien, como si fuese una unidad. En realidad esta comunidad autónoma está fracturada. Socioeconómicamente está fracturada. Porque tú no puedes tener dos provincias contiguas, como son Zamora y Valladolid, y que Zamora está al pie del 80% de renta per cápita en España y Valladolid esté en un 107%. Eso no tiene ni pies ni cabeza. ¿Y son contiguas, eh?”, remacha. 

Y los fondos de cohesión que León necesita... repartidos en Castilla

El informe de Proyecto León de este año 2023 señala una derivada más de la dramática y perversa situación en la que se encuentra el País Leonés al estar opacado en las estadísticas autonómicas, nacionales y Europeas.

“La Región Leonesa ha permanecido en niveles de renta que permitían captar abundantes fondos de cohesión si hubiese concurrido individualizadamente a las convocatorias de ayudas. Castilla la Vieja, por su lado, tendría menor acceso a ayudas de nivelación por su alto nivel de renta respecto al resto de regiones españolas. La Región Leonesa hubiese captado mucho más por su depauperada situación”, señala el estudio.

“Sin embargo, la Junta de Castilla y León no promovió la solicitud a la UE de ambas regiones por separado. Los fondos europeos para Castilla y León se captaron debido a la pobreza de la Región Leonesa, que reducía la renta media del conjunto. Sin embargo, los recursos se aplicaron en todas las provincias de la autonomía, incluyendo las de mayor renta. Ello a pesar de las grandes diferencias internas, de las necesidades de reequilibrio y de redistribución de la riqueza”, explica el informe de Proyecto León.

Por tanto concluye el documento que “la aplicación consciente de fondos de cohesión solapando esta realidad económica es un fraude de ley. Representa un perjuicio deliberado para los leoneses. La actuación de la Junta de Castilla y León en este apartado resulta éticamente reprobable y puede que, indiciariamente, prevaricadora, ya que es injusta a sabiendas por los responsables que dirigían la propia administración pública”.

La no inclusión de la Región Leonesa en una división económica NUTS2 cuando la comunidad de Castilla y de León dejó de ser Objetivo 1 de los Fondos de Cohesión en 2003 “demuestra que la política de la Junta es de ordeño de las provincias leonesas”, considera Javier Callado, que denuncia “cómo aprovechan los terribles datos leoneses para acudir todavía a fondos europeos y repartirlos en todas las provincias por igual, beneficiando a las más desarrolladas. Nosotros los leoneses, lo que somos es la vaca lechera, nosotros estamos para que nos ordeñen”.