La provincia de León creció un 20% menos que la autonomía de Castilla y León y un 40% menos que España, según se desprende de los datos del Producto Interior Bruto del INE. Una de las provincias que en los años ochenta estaba por encima de la media nacional en las cuentas económicas, hoy se encuentra muy por debajo de ese umbral.
En concreto la provincia de León aumentó en los últimos veinte años un 44% su PIB, pasando de 6.482 millones de euros a 9.391 en 2020, un aumento de un 44,1%; pero que son comparables al Producto Interior Bruto de hace casi diez años (9.272 millones en 2013). Mientras, la Comunidad Autónoma de Castilla y León aumentó un 51,2% (de 36.646 a 55.401 millones). España pasó de 657.851 millones a 1.121.948, con un aumento económico en esos cinco lustros de un 73,18%.
Estos números indican un diferencial de crecimiento de un 20% de la provincia de León por debajo de lo que lo ha hecho su autonomía (perdiendo, además peso económico en el PIB autonómico del 17,6 al 16,9%) y que ha ido un 40% más lenta comparado con el desarrollo del país. Una tendencia que se observaba ya en 2016 cuando la economía de la provincia de León se recuperaba varios años por detrás que España y la Comunidad.
En renta, la diferencia es aún más significativa con las provincias de Burgos y de Valladolid. Un leonés gana, de media, un 30% y un 20% menos que un burgalés y un Vallisoletano. Disimetría que se agrava en toda la Región Leonesa, como bien explica el informe del Observatorio Económico de Proyecto León. Es decir, un burgalés tiene un 104% de renta de la media de la UE 27, mientras que un leonés no pasa del 75%.
Otro dato: las exportaciones provinciales, que registraron un incremento del 23,15% en 2018 en 2019 descendieron un 27,23%, un porcentaje muy superior al de Castilla y León (-4,60 %), mientras que, en España, la variación siguió siendo positiva (1,78 %). En 2020 el valor de las exportaciones, con la pandemia, se redujo en los tres ámbitos.
De las peores tasas de actividad de España
Los informes del Servicio Estatal de Empleo (Sepes) marcan que “la tasa de actividad en la provincia de León se redujo en el cuarto trimestre de 2020 respecto al año anterior en mayor medida (3,63 puntos) que la de Castilla y León (1,12 puntos) y la de España (0,55 puntos). Por lo que la tasa de la provincia de León (48,51%) sigue siendo casi seis puntos inferior a la de Castilla y León (54,21%) y diez puntos inferior a la de España (58,19 %)”.
La provincia de León es la tercera peor del país en tasa de actividad, sólo son peores Lugo y Orense, mostrando el gran problema que hay en el Noroeste Español, ya que los datos de Zamora y Asturias también son muy bajos. No apostar en el nudo de comunicaciones entre Asturias, Galicia y el resto de España ha llevado a las provincias de la zona a una enorme crisis de la que nadie se ocupa porque para los españoles la llamada España Vaciada está en Aragón y no aquí, pese a tener unos datos de desplome más que alarmantes.
Empleo por sectores
La tasa de empleo de la provincia de León había descendido 8,78 puntos porcentuales desde 2007 hasta 2013; en los años siguientes tuvo una ligera recuperación por debajo de la de Castilla y León (autonomía en la que hasta los mapas del paro muestran claramente la diferencia entre las dos regiones, con la leonesa muy a peor) y España, pero con el descenso drástico de la actividad económica en 2020, la tasa de empleo se ha colocado cuatro puntos por debajo de la de 2007. Entre 2008 y 2019 se perdieron 14.100 ocupados en el sector de la construcción, 5.000 en la industria y 700 en agricultura, mientras que el sector servicios había recuperado 3.400.
“En variación interanual (2020-2019), el número de ocupados se ha reducido en 11.800 con respecto al cuartotrimestre del año anterior, 3.400 estaban en la agricultura, 8.500 en la industria y 3.800 en los servicios. Sin embargo, la construcción ha recuperado 3.900 ocupados que había perdido en el periodo anterior. En 2019, los ocupados habían descendido ligeramente (0,17 %), mientras que los parados aumentaron un 25% con respecto al cuarto trimestre del año anterior; en 2020 descendieron un 6,54 % los ocupados y un 14,07% los parados”, apunta el informe del servicio nacional de empleo.
De la evolución de la población activa provincial, destaca el aumento de los ocupados en el sector de la construcción (48,15 %) frente al resto de sectores: agricultura (-37,78 %), industria (-27,96 %), servicios(-2,86 %), ya que es el único que no se ha visto afectado por la crisis y, además, se ha recuperado con respecto al año anterior. “También llama la atención el descenso de los parados debido al aumento de los inactivos”, apuntan desde el Sepes.
Brutal desplome poblacional
Otra de las consecuencias de la enorme crisis que se produce en la provincia de León es la aceleración en el desplome poblacional, siendo uno de los lugares de España con mayor descenso de habitantes en los últimos años. Los últimos datos implican que en León se han perdido más de cincuenta mil personas en doce años y que el padrón de 2022 ya marca que está por debajo de los 450.000 habitantes.
De hecho, la circunstancia hace que hasta las cabeceras de comarca estén perdiendo población, porque la debacle poblacional es algo que se siente en todos los aspectos. La capital leonesa, que a primeros de siglo tenía casi 150.000 habitantes, está ahora rondando los 120.000. Se da el caso que la Región Leonesa pierde al año más habitantes que toda la Comunidad Autónoma de Castilla y León, encabezando por mucho la provincia leonesa el descenso, llegando a tener más de la mitad del mismo anualmente, y durante los primeros veinte años de este siglo XX el País Leonés perdió cien mil habitantes (el 50% de la provincia leonesa) mientras que el resto de provincias castellanas llegó a ganar 15.000.
Los datos económicos, mire por dónde se mire, son de una inevitable crisis que ya provocó una gran manifestación para pedir soluciones a las Administraciones, un plan de rescate, para León el 16 de febrero de 2020. Justo después llegó la pandemia y la Mesa por León prácticamente no se ha reunido ni ha hecho nada destacable. Este 12 de mayo los sindicatos convocan a los leoneses a que vuelvan a la calle a recordar a los políticos que León se muere, o que, al menos con los datos se puede decir que se está borrando sin que Madrid o Valladolid estimen necesario un plan específico para evitarlo.