Honores a los héroes de Maraña
Emilio Pérez Peláez, Marcos Antonio Rodríguez, José Martínez Conejo. Los nombres del capitán, teniente y agente de la Guardia Civil que el pasado 24 de agosto perdieron la vida cuando se estrelló el helicóptero con el que realizaban un rescate de montaña en Maraña (Picos de Europa, León) sonaron hoy con voz de homenaje y reconocimiento frente a la Casa de Cultura de Sabero, localidad que acoge una sede del Grupo de Rescate e Intervención en Montaña, Greim, del Instituto Armado.
El Ayuntamiento que preside Francisco Javier García quiso dedicar una jornada de recuerdo al capitán Pérez Peláez y al teniente Benito Rodríguez, miembros del Servicio Aéreo de La Virgen del Camino, y al Greim, en el que el agente Martínez Conejo llevaba tres décadas de servicio desde la base de Sabero para dejar constancia del agradecimiento por una labor callada y permanente.
Numerosos vecinos compartieron este mediodía el acto en el que se recordó el acuerdo plenario que decidió rendir el homenaje a los miembros del Greim como “garantes de la seguridad del ciudadano y ejemplo de profesionalidad, entrega y sacrificio”; valores por los que el regidor pidió una ovación que secundaron los asistentes al tiempo que reclamó a quien competa que les dote de los mejores medios técnicos posibles para el desarrollo de su labor.
También el general jefe de la XII Zona de la Guardia Civil, José Manuel Díez Cubelos, aludió en su intervención a la labor “abnegada y desinteresada” de todos los que han formado parte durante sus tres décadas de existencia del Greim de Sabero, de quienes destacó su espíritu de sacrificio y su integración plena en un pueblo y un municipio que quiso hoy convertirles en protagonistas de su afecto.
La localidad leonesa de Sabero rinde homenaje al Greim con motivo del fallecimiento de tres de los miembros de la agrupación con sede en el municipio el pasado año en un accidente de helicóptero. / Carlos S. Campillo / ICAL
De hecho, el acto contó con una representación de agentes que prestaron servicio en esa unidad desde sus comienzos, algunos ya retirados y otros trabajando en destinos diferentes. Junto a ellos, los miembros actuales, acompañados por una escuadra de honores y por los efectivos del Servicio Aéreo de la Guardia Civil de La Virgen del Camino, partícipes de una ceremonia dedicada también a sus compañeros fallecidos.
El sargento Enrique Ferrero, responsable del Greim de Sabero y superviviente a la tragedia que participaba en el rescate en el que murieron los tres agentes y que logró sacar de la aeronave la camilla con el herido antes del fatídico impacto se mostraba agradecido al Ayuntamiento su gesto y a las autoriades militares su apoyo y presencia. “Es un día triste pero a la vez importante porque es un reconocimiento a nuestra labor. Estamos muy agradecidos y... a seguir trabajando”.
Siete meses después de la tragedia, el sargento apunta que “tienes que aprender a vivir con lo que ha pasado. Olvidar no lo olvidas pero aprendes a tenerlo como un recuerdo más”. De su trabajo, añade, la mayor satisfacción es siempre la que da rescatar a una persona. Lo dice en plena jornada de “contraposición de muchos sentimientos, porque aunque el homenaje también viene bien, te hace revivir esa situación y no es plato de gusto”.
Además de diversos cargos de responsabilida de la Guardia Civil también el presidente de la Diputación, Emilio Orejas, acudió a Sabero y no pudo hacerlo aunque envió un mensaje de apoyo el recién elegido delegado del Gobierno en Castilla y León, Juan Carlos Suárez-Quiñones. Al turno de intervenciones le siguió la entrega de sendos ramos de flores a los familiares de los tres guardias civiles, el homenaje a los caídos, una salva de fusilería, el canto del himno de la Benemérita y un desfile que se cerró con los aplausos de los presentes.
El Greim de Sabero
Compuesto en la actualidad por un sargento, dos cabos y siete guardias civiles, trabaja frecuentemente en colaboración con la Unidad de Helicópteros (UHEL) de La Virgen del Camino, como ocurrió el día del trágico accidente. Tiene la misión de ejercer las funciones encomendadas a la Guardia Civil en las zonas de montaña y de difícil acceso. En concreto, desarrolla labores de rescate de personas, investigación de accidentes, conservación de la naturaleza, seguridad ciudadana en instalaciones deportivas de montaña, estaciones de esquí y competiciones deportivas y la colaboración en prevención de accidentes y promoción de la seguridad en la montaña.
El Greim de Sabero tiene su zona principal de actuación en el Macizo Central de los Picos de Europa, aunque acude a todos aquellos rescates en los que sea necesario el uso de material específico de montaña en apoyo a otras unidades territoriales de la Guardia Civil. Está adscrito al área de Cangas de Onías (Asturias), compuesta por las unidades de Cangas (Sereim), los Greim de Mieres (Asturias) y Potes (Cantabria) y el Ereim de Trives (Orense). En caso de necesidad, los distintos grupos se auxilian entre ellos, según explicaron fuentes del Instituto Armado.
Actividad en 2015
En lo que va de año, el Greim de Sabero ha participado en el rescate de seis personas -una de ellas, ujn montañero que se despeñó, fallecida. Además, a consecuencia de la gran nevada registrada tanto en León como en Palencia llevaron a cabo distintas actuaciones en ambas provincias para acercar alimentos y medicamentos para los vecinos de los pueblos afectados y los animales. Los efectivos del Greim de Sabero también llevan a cabo labores de orden público en las estaciones de esquí leonesas, donde en los últimos meses contabilizan más de una treintena de servicios.
