Villaquilambre mantendrá abierta su Unidad de Respiro para mayores y enfermos de Alzheimer
El gobierno popular y cívico de Villaquilambre ha llegado a un acuerdo con la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer y con los propios familiares de los usuarios más habituales para mantener abierta la Unidad de Respiro municipal, que se ubica en el Centro Cívico de Navatejera. Atiende a una decena de personas mayores, aquejadas de demencia senil o de Alzheimer, no sólo para facilitarles los cuidados que precisan sino, sobre todo, para permitir a sus familiares y cuidadores ejercer su trabajo y demás tareas durante ese tiempo.
Para el próximo curso ya hay seis personas y aún pueden acceder a este servicio otras cuatro. Se trata, explica el concejal de Servicios Sociales, Juan Carlos Cortina, “de una competencia impropia del Ayuntamiento, pero de utilidad probada y, por tanto, hemos hecho todo lo posible, dadas las circunstancias, por mantenerlo”. La fórmula ha sido un acuerdo con la Asociación de Familiares de Enfermos de Alzheimer que, en adelante, aportará el personal cualificado necesario para la atención de los usuarios. La misma asociación se encargará del transporte. El Ayuntamiento aportará las instalaciones, perfectamente preparadas, dado que cuentan con sala de actividades, servicio de peluquería y podología, gimnasio y un parque cercano para efectuar los paseos, y los propios usuarios se harán cargo del resto del coste.
Funciona desde las 9 de la mañana hasta las 2 de la tarde, de forma continuada o por horas. Durante este tiempo, estas personas están atendidas por personal cualificado y realizan diferentes actividades, como ejercicios para estimular la memoria o de psicomotricidad, además de tener la oportunidad de relacionarse socialmente. “Mientras tanto, sus familiares pueden cumplir sus obligaciones laborales, hacer gestiones o, sencillamente, tomarse un tiempo que les libere de la carga, a veces agotadora, de cuidar de una persona dependiente. De hecho, también se organizan charlas formativas e informativas a estos familiares para que cuenten con el apoyo psicológico y emocional que precisan”, señala Juan Carlos Cortina.
